Salsas básicas y derivadas. Francis Egea 2016.
1.
Características y clasificación.
La palabra salsa procede del latín “salsus” que
quiere decir salado. En el transcurso de los años las salsas han evolucionado
mucho siendo la tendencia actual aligerarlas lo más posible para que resulten
más finas y de mejor digestión.
Def. Según diccionario gastronómico de Carlos
Delgado: Composición más o menos fluida de varias
sustancias, que se hace para aderezar o condimentar la comida.
Def. Según el diccionario de la R.A.E.: (Del latín salsa, salada.) f. Composición o mezcla de varias
substancias comestibles desleídas, que se hace para aderezar o condimentar la
comida. 2. fig. Cualquier cosa que mueve o excita el gusto.
Las salsas son la base de una buena cocina y está en
la mano del cocinero que estas sean ligeras y sabrosas.
La gran variedad y el refinamiento de las salsas son
el atributo fundamental de la cocina francesa. La preparación de las salsas
requiere sumo cuidado, ya que no debemos olvidar que gracias al refinamiento de
las mismas es por lo que ésta cocina goza de una supremacía mundial.
La confección de las salsas y su éxito es un honor
para la casa donde se sirven. Este éxito depende de la calidad de los elementos
que la componen. Los fondos de cocina son la base, pero también lo es el gusto
personal de cada uno.
Los pescados, carnes y aves, se sirven con salsas
adecuadas a cada manjar: así, por ejemplo, un pescado se acompañará con una
salsa confeccionada con fumet de pescado, etc. Como en todo arte, la armonía y
simplicidad es lo que se debe buscar y alcanzar.
Para los platos de carne con salsa, dentro de lo
posible, se recomienda utilizar el jugo ligado, en lugar de la media glasa o la
española.
Sea cual sea el refinamiento utilizado para la
fabricación de estas salsas de base, su empleo se ha extendido tanto que los
aficionados se lamentan; todas las salsas dicen, tienen el mismo sabor. Aunque
fueses el mejor del mundo, el gusto “uniformado” es siempre detestable.
Una salsa, no lo olvidemos nunca, equivale a una
firma.
Las salsas son los líquidos sustanciosos espesos o
ligados, que tienen por misión realzar el sabor de los alimentos, ablandarlos y
hacerlos de más fácil digestión, así como complementar su valor nutritivo.
Existen dos clases de salsas:
a)
Las que se hacen a merced
de los ingredientes que componen el plato como carnes, pescados, etc.
b)
Las que cuya elaboración
es totalmente independiente del elemento o elementos del plato.
Pueden ser líquidas o semilíquidas, frías o calientes.
Clasificación.
Salsas base.
-
Grandes. Mayor importancia
por su mayor uso.
-
Pequeñas. Menos
aplicaciones y más rápidas de hacer por ir emulsionadas.
Derivadas. Tienen su origen en las básicas anteriores.
Con nombre propio. Son las elaboradas merced a los ingredientes que las componen y que
cuando forman parte del plato reciben el sabor de estos en su elaboración
final.
Otra división:
-
Por su color, blancas y
oscuras. (Paul Bocuse)
-
Por su espesor, espesas y
ligeras.
-
Por su temperatura, frías
y calientes.
-
Por su ligazón, ligadas y
emulsionadas. (Paul Bocuse) Están constituidas por una parte por roux oscuros,
dorados o blancos, bañados con leche o con jugos o fondos preparados
especialmente; Por otra, por una asociación de yemas de huevo y de mantequilla,
de crema de leche fresca o de aceite emulsionados y, finalmente, por
concentrados o extractos grasos o magros.
En la cocina casera, los jugos o fondos pueden ser sustituidos por
caldo; pero tal sustitución siempre irá en detrimento del sabor de la salsa
elaborada.
2.
Salsas básicas.
Se denominan salsas básicas a las que sirven como base para la
elaboración de otras muchas llamadas derivadas o compuestas. Las vamos a
subdividir para su estudio en:
-
Grandes salsas básicas a
base de fondo.
-
Grandes salsas básicas
emulsionadas.
2.1. Grandes salsas básicas a
base de fondo.
Son las salsas con las que se
pueden elaborar mayor número de salsas compuestas o derivadas.
La base fundamental para la calidad de estas es la perfecta
elaboración y la calidad de los géneros con las que previamente se habrán
realizado los fondos.
2.1.1. Salsa Española.
Especificidades.
Es una salsa de color pardo oscuro confeccionada con fondo oscuro reducido
durante bastante tiempo y ligado con un roux oscuro empleando una ligazón
disuelta en vino tinto y siendo la harina del roux tostada. (roux para 10 l.
1.250 gr). Se llama salsa española porque el origen está en una salsa que
hacían los españoles en la época de Eugenia de Montijo, personaje que llevo la
receta al país vecino. Se conoce también con el nombre de Demi-Glacé que los franceses
dicen que es una española mejorada.
(Paul Bocuse)
Para un litro de salsa. Una zanahoria y una cebolla de tamaño mediano; 50 gr de
tocino fresco de pecho, todo ello cortado a daditos; una ramita de tomillo, un
trocito de hoja de laurel; ½ vaso de vino blanco seco; 150 gr de roux oscuro
cocido; 2 l de jugo o fondo de ternera o, en su defecto, caldo con coloración,
muy poco sazonado con sal.
Método:
Derretir el tocino en la brasera en la que se cocinará la salsa española,
agregar las verduras y las hierbas aromáticas; calentar a fuego suave hasta que
tomen un poco de color. La mezcla de verduras cortadas a daditos es conocida
por la denominación de “mirepoix”.
Escurrir la
grasa derretida del tocino; Echar el roux, el jugo o fondo, según la técnica
indicada en la receta de los roux, y, seguidamente, verter el vino blanco.
Dejar cocer
hirviendo suavemente por espacio de 2 horas, retirando a menudo las impurezas y
la grasa que se van acumulando en la superficie del líquido, del lado opuesto a
la ebullición (espumado).
Si no se ha
preparado el roux por adelantado, se cocerá directamente en la propia brasera
de cocción, tras lo cual se agregará la “mirepoix” dorada en una sartén
pequeña, que se desglosará con el vino blanco.
Al llegar a
este punto de cocción, se pasará la salsa española por una estameña o por un
colador muy fino, y se la volverá a poner sobre el fuego, agregándole el
contenido de un vaso de puré reducido.
Dejar cocer
a fuego muy suave por espacio de una hora más y espumar a menudo las impurezas.
Si se
conserva la salsa española con vistas a una ulterior utilización, se deberá
pasar por una estameña, recogerla en un cuenco y removerla frecuentemente con
una cuchara de madera hasta que se haya enfriado por completo. Se evitará de
esta suerte la formación de una espesa película en su superficie y,
consiguientemente, la formación de grumos
Demi-glace: el “Demi-glace” es un derivado perfeccionado de la salsa española
reducida a los 2/3 de su volumen, y luego llevada a la consistencia deseada
mediante la adición de fondo de ternera rico en elementos sápidos, es decir muy
sabroso. Se comprende de esta forma el
motivo por el cual las salsas base, así como los fondos con los que son
elaboradas éstas, deben llevar siempre muy poca sal.
Conviene
dar el toque final al “Demi-glace” con la brasera apartada del fuego,
agregándole vino de Madeira.
(Escoffier). La
salsa española no es más que un fondo oscuro ligado con un rubio también
oscuro, preparado con mantequilla y harina en partes más o menos iguales. Preparamos
100 gr de rubio y lo dejamos enfriar. Una vez frío, desleírlo en un litro de
fondo oscuro, sirviéndose de un batidor para huevos, a fin de obtener una
ligazón uniforme, sin grumo alguno.
Ponerla de
nuevo en el fuego, dejando que hierva suavemente, sin dejar de removerla con el
batidor o una espátula de madera. Dejarla a un lado del fuego, para que
continúe hirviendo lenta y
regularmente.
Agregar un
mirepoix, preparado de la siguiente manera: aparte, en una cacerola plana,
dorar 30 gr de tocino fresco cortado a cuadraditos, 30 gr de cebolla en
rodajas, 50 gr de zanahorias, un poco de tomillo, media hoja de laurel y unas
ramitas de perejil.
La cocción
de la salsa junto con el mirepoix debe prolongarse durante tres horas,
agregando de cuando en cuando algunos dl de fondo oscuro frío, para facilitar
la desmembración de todos los componentes de la salsa, que será tanto más
rápida cuanto más saturados estén de jugos de carne los fondos empleados en su
preparación.
Pasarla a
una terrina a través de un colador fino (presionando ligeramente el mirepoix),
sin dejar de removerla hasta que esté casi completamente fría. Mantenerla en
reserva para posibles usos.
Salsa media glasa (Demi-glace).
La salsa
llamada media glasa es en realidad la misma salsa Española a la que se añade en
último momento un poco de fondo oscuro de ternera concentrado, o bien gelatina
de carne. Si la queremos obtener atomatada le añadiremos un tercio de su
volumen de salsa de tomate.
(Pellaprat). Para
dos litros: 250 gr rubio oscuro; cuatro litros y medio fondo oscuro claro; 100
gr zanahorias; 50 gr cebollas; 50 gr tocino del pecho; una rama de tomillo y
una hoja pequeña de laurel; un dl vino blanco.
Hacer un mirepoix con las cebollas, zanahorias
y tocino. Añadirle laurel y tomillo. Dorar este mirepoix en una marmita.
Deglasar con vino blanco, añadir el rubio, rociar con el fondo oscuro caliente,
cocer lentamente durante dos horas, espumando y desgrasando de vez en cuando.
Pasar por un colador fino. Cocer de nuevo durante dos horas, espumando y
desgrasando. Colar y dejar enfriar, removiéndolo con la espátula, hasta que se
enfríe completamente. Al día siguiente, hervirlo dos horas más, añadiendo 250
gr de puré de tomate concentrado o un kg de tomates frescos. Colar. Esta salsa
se conserva bien de ocho a catorce días en sitio fresco. Si se desea hacer la
salsa española en menos tiempo, se puede añadir el tomate a la segunda cocción.
La salsa será menos concentrada y se conservará menos tiempo.
(Nueva
fórmula). Para unos tres litros de salsa: dos kg
y medio de huesos de vaca y un kg de huesos de ternera en pequeños trozos; 200
gr de desperdicios (o piel de tocino) blanqueados y cortados en dados; 150 gr
de zanahoria y de cebollas en dados gordos; un diente grande de ajo; un
ramillete de hiervas; 500 gr de puré de tomate o 600 gr de tomates frescos; 125
gr grasa; 175 gr harina; 100 gr recortes de champiñones.
Saltear
ligeramente los huesos en la grasa. Añadir las zanahorias, las cebollas,
cortezas de tocino y dejarlo dorar. Espolvorear con harina, brasear y dejar
tostar, pero sin que se ponga demasiado oscuro, por temor a que amargue. Añadir
cinco litros de agua, mezclar y llevar a punto de ebullición, sazonar
ligeramente, añadir el ajo, el ramillete y los recortes de champiñones. Dejar
cocer cinco horas a fuego lento. Cortar los tomates frescos muy finos, y
pasarlos por el horno para evaporar toda su agua, o pasar ligeramente por el
horno el puré de tomates preparado. Mezclar el puré de tomate con la salsa y
dejar cocer de nuevo durante cinco horas a fuego lento, espumando y desgrasando
a menudo. Pasarlo por el chino, removiendo con la espátula, hasta que enfría.
Cubrirlo con un papel engrasado y guardarlo en sitio fresco. La salsa española
se conserva así ocho días en la nevera.
Salsa media glasa. Para medio litro: medio litro
salsa española, y otro medio litro de fondo oscuro claro. Reducir a la mitad la
salsa española y el fondo oscuro mezclados. Pasarlo por el tamiz.
Hemos visto
tres alternativas diferentes pero que van a dar un resultado muy similar. En
resumen podríamos decir, que las hortalizas (puerros, zanahorias, cebolla,
apio) limpias y cortada en mirepoix se rehogan en la mantequilla. A
continuación se añadirían las especias (pimienta en grano, laurel, tomillo y
perejil), para seguir con el erogado de la harina tostada. Incorporaríamos el
fondo oscuro colado e hirviendo y
dejaríamos cocer a fuego lento entre (2-5 horas) dependiendo del método
escogido, espumándolo habitualmente. Una vez terminada la elaboración, colamos
y cubrimos con mantequilla para dejarlo enfriar.
* Ilustración de las fases de elaboración de
la salsa española.
![](file:///C:/Users/FRANCI~1/AppData/Local/Temp/msohtmlclip1/01/clip_image002.jpg)
![](file:///C:/Users/FRANCI~1/AppData/Local/Temp/msohtmlclip1/01/clip_image003.png)
![](file:///C:/Users/FRANCI~1/AppData/Local/Temp/msohtmlclip1/01/clip_image004.png)
Material utilizado. Marmita,
colador, chino y espátula de madera.
Resultados. Debe resultar de un color oscuro, brillante y transparente.
Aplicaciones. Para la elaboración de
multitud de salsa derivadas. Para el mojado de breseados y salteados.
Alternativas. Puede ligarse el fondo
oscuro reducido con el roux. Podría ligarse el fondo con la harina disuelta en
vino e incorporársela hirviendo.
Salsas derivadas de la “española”.
- Salsa Périgueux: Salsa española con una reducción de vino de Madeira (salsa
Madeira), esencia de trufa y trufa en brunoise. Para pequeñas piezas de carne,
aves y caza.
Según Escoffier agregaremos a medio
litro de salsa media-glasa reducida, 3 cucharadas de trufa cuidadosamente
mondada y picada, completándola con algunas cucharadas de vino de Madera.
Para Bocuse, se trata de preparar una
salsa al Madeira, dándole el último toque agregando 100 gr de trufas picadas
por cada medio l de salsa. Si se trata de trufas en conserva, echar en la salsa
el jugo que hay en la lata; si se trata de trufas del tiempo, conviene picarlas
crudas, saltearlas en mantequilla caliente durante unos segundos en una brasera
y echar en ésta la salsa al Madeira previamente preparada.
Pellaprat nos dice que para un cuarto
de litro necesitaremos medio l salsa Madera, 30 gr de trufa y 25 gr de
mantequilla. Es una salsa al Madera con trufas cocidas picadas o cortadas en
láminas o filetes. Ponerle un poco del caldo de cocer las trufas. Añadir la
mantequilla, fuera del fuego, en el último momento. Acompaña las entradas,
patés calientes, timbales, etc.
Práctico: Demi-glace a la esencia de
trufa. Guarnición: trufa cortada.
- Salsa Perigourdine o
Périgord: Es igual que la anterior pero
con la adición de puré de foie-gras y las trufas cortadas más grandes. Se
utiliza para fritos, huevos, carnes salteadas y patés.
Bocuse solo nos sugiere la diferencia
del corte de la trufa, laminillas en vez de brunoise.
- Salsa Bordalesa o
Bordelesa: Salsa española con reducción
de vino tinto sobre un erogado en mantequilla de chalota, bouquet garni y dados
de tuétano. Para carnes rojas.
Escoffier nos explica que para obtener
un cuarto de litro de esta salsa deberá reducirse a su mitad medio decilitro de
vino tinto al que se la habrá incorporado un cucharadita de escalonias picadas
y una pulgarada de pimienta blanca. Añadir un decilitro y medio de salsa media
glasa, dejar hervir durante algunos minutos y ponerla en una cazuela más
pequeña, pasándola previamente por un tamiz fino. Completar la salsa con 50 gr
de tuétano de buey muy fresco, cortado en dados o rodajas y cocido en agua
salada durante breves minutos. Servir caliente. Turnedos, entrecotes asados y
en general asados de carnes rojas.
Bocuse utiliza los siguientes
ingredientes: 2 dl de un buen vino tinto; una cucharadita colmada de escalonia
picada; una pizca de pimienta recién molida, un trocito de hoja de laurel y una
ramita de tomillo o de serpol; 2 dl de semiglaseado o, en su defecto de salsa
española; 30 gr de mantequilla y 60 g de tuétano de buey muy fresco. Método:
Poner a calentar en una brasera una cucharadita de mantequilla. Cuando empiece
a chisporrotear, echar la escalonia picada, hacerle tomar un poco de color a
fuego suave e incorporar los condimentos y el vino. Llevar a ebullición y
reducir rápidamente la preparación hasta que no queden más que 2 cucharadas de
líquido. Agregar el semiglaseado y dejar hervir a fuego lento durante 15
minutos. Pasar por el tamiz, hacer hervir de nuevo, comprobar el sazonamiento y
conservar aparte en espera de ser servida. Llegado este momento, y con la
brasera apartada del fuego, incorporar a la salsa la mantequilla que quede,
removiendo continuamente y luego el tuétano cortado a daditos y escalfado en
agua hirviendo ligeramente sazonada con sal.
Para un cuarto de litro Pellaprat nos
propone: una escalonia; 100 gr de tuétano; un dl vino tinto; pimienta en grano;
tomillo; tres dl media glasa. El tiempo de cocción que estima oportuno es de 25
minutos. Comienza la elaboración rehogando en mantequilla durante un minuto la
escalonia picada. Rocia con el vino tinto, añade seis granos de pimienta
picada, una brizna de tomillo y reduce. Incorpora la media glasa y deja cocer
10 minutos a fuego lento. Luego se mezcla el tuétano fundido con la salsa. El
tuétano juega el papel de la mantequilla. Esta salsa se sirve con los turnedos
o los entrecotes. Encima de la carne preparada se ponen láminas de tuétano de
vaca escalfados con agua salada muy caliente, pero no hirviendo.
Práctico: Bordelaise.- Erogar
escaluñas picadas, a la manteca, pimienta blanca en grano molida, bouquet de
laurel y tomillo, reducción de vino tinto. Mojar con Demi-glace. Cocinar.
Pasar. Poner a punto con manteca y glace de viande. Sazonar. Agregar dados de
tuétano y perejil picado.
- Salsa Oporto o Madeira: A una reducción de parte del vino, añadir la española y finalmente
el resto del vino y mantequilla. Para todo tipo de carnes.
Bocuse: Salsa al Madeira con
champiñones. Ingredientes: 250 gr de champiñones pequeños y bien blancos; ½ l
de semiglaseado o, en su defecto, de salsa española; ½ vaso de un buen vino de
Madeira; 60 g de mantequilla. Método: Se lavarán previamente y con todo cuidado
los champiñones, es decir, se eliminará la arena que podría estar adherida a
los pies de los champiñones y se lavarán rápidamente, dejándolos el menor
tiempo posible en contacto con el agua: un remojo excesivo puede ennegrecerlos.
Al ser los champiñones muy blancos y
de carne muy prieta, no es preciso pelarlos.
Poner a calentar en una sartén 1/3
parte de la mantequilla; cuando esté bien caliente, color avellana, echar en
ella los champiñones escurridos, saltearlos rápidamente a fuego vivo, y,
seguidamente, bañar con el semiglaseado. Reducir ligeramente a la cantidad
equivalente al vino de Madeira disponible y, con la cacerola apartada del
fuego, incorporar este último; Luego, echar en la salsa, removiéndola
continuamente, lo que queda de mantequilla. Comprobar el sazonamiento antes de
servir.
Salsa al Madeira: es la misma sal que
la anterior, pero hecha con recortes de champiñones o con pies de éstos; se
pasa por la estameña antes de proceder a su puesta a punto, es decir, antes de
incorporarle el vino de Madeira y la mantequilla.
Salsa al vino de Oporto: proceder como
se ha explicado en la receta anterior, sustituyendo el vino de Madeira por el
vino de Oporto. Se da el último toque rociando la salsa con el zumo de una
naranja madura y dulce y con el de medio limón.
Pellaprat: salsa al Madera: para un
cuarto de litro; medio l media glasa; siete cl vino de Madera. Reducir la media
glasa en una quinta parte y añadir el vino de Madera. Darle unos hervores. Se
sirve con el cerdo, así como con el jamón y carnes de vaca.
Al Oporto proceder igual sustituyendo
el vino.
Práctico: Madère. Demi-glace perfumada
al vino Madera.
Porto. Demi-glace perfumada al vino
Oporto.
Porto (inglesa). Reducción de vino
Oporto con escaluñas picadas, tomillo. Añadir jugo y corteza de naranja, sal y
punta de cayena. Pasar y agregarlo a un fondo de ternera ligado.
- Salsa Charcutera: rehogar en mantequilla cebolla picada, añadir vino blanco, reducir
y adicionar la salsa española y cocer. Fuera del fuego añadir la mostaza y los
pimientos en juliana y una cucharadita de azúcar. Para parrilladas de cerdo. No
debe cocer después de la adición de
mostaza.
Bocuse. Cortar en finas rodajas una
cebolla de tamaño mediano y agregarla a una cucharadita de mantequilla bien
caliente en una sartén pequeña. Dejar que la cebolla tome color a fuego suave;
rociarla con el equivalente de un vaso de vino blanco seco (2dl); reducir la
preparación hasta que no queden más que 2 cucharadas; añadir 3 dl de
semiglaseado o de salsa española. Dejar cocer suavemente durante 15 minutos y,
en el momento de servir, con la brasera apartada del fuego, incorporar,
removiendo la salsa, 50 gr de mantequilla y 60 gr de pepinillos picados o
cortados en finas rodajas.
Pellaprat. Para un cuarto de litro: un
dl vino blanco; dos dl media glasa; una cebolla; 20 gr mostaza; 50 gr
pepinillos cortados en juliana. Cocción 15 minutos.
Dorar con mantequilla la cebolla
picada, rociarla con el vino blanco y reducirla a la mitad. Añadir la media
glasa y cocer diez minutos. Retirar del fuego, añadir la mostaza y los
pepinillos. Acompaña las parrilladas de cerdo.
- Salsa Robert: igual que la anterior pero sin los pepinillos.
Bocuse. Se trata de una sal picante a
la que se agrega al mismo tiempo que la mantequilla del toque final, 2
cucharaditas de mostaza y una pulgarada de azúcar en polvo. Bajo ningún
concepto deberá hervir la mostaza.
Pellaprat. Para medio litro: una
cebolla picada muy fina; dos dl vino blanco; medio litro de media glasa; 20 gr
de mantequilla; 30 gr de mostaza. Cocción 20 minutos.
Saltear la cebolla en la mantequilla
durante unos diez minutos sin que tome color. Mojar con el vino blanco y
reducir a la mitad. Incorporar la media glasa, y cocer 20 minutos más. En el
último momento añadirle la mostaza. Para acompañar al cerdo a la parrilla.
Práctico. Cebolla picada fina erogada
a la manteca a blanco. Mojar al vino blanco. Reducir. Agregar : Demi-glace, un
jugo de limón, mostaza, sal y pimienta. Una vez agregada la mostaza no debe
hervir.
- Salsa Diabla: rehogar chalota en mantequilla, mojar con el vino blanco y
reducir, añadir la salsa española y cocer y sazonar con bastante cayena. Esta
salsa se utiliza en pequeñas cantidades para acompañar especialmente aves a la
parrilla, aunque podrá usarse para cualquier parrillada.
Bocuse. Proceder como en el caso de la
salsa “charcutera”, pero suprimiendo los pepinillos y sustituyendo la cebolla
por 3 escalonias. Pasar la salsa por la estameña y condimentarla con bastante pimienta
recién molida o con una pizca de pimienta de Cayena, no tan aconsejable, dado
que más que un aroma, es un fuego que abrasa desagradablemente el paladar.
Pellaprat. Para cuatro dl: dos
escalonias; tres dl vino blanco seco; dos dl media glasa; Worcestershire sauce.
Cocción 15 minutos.
Dorar con mantequilla las escalonias
picadas, mojarlas con el vino blanco y reducirlo lentamente a la mitad. Añadir
la media glasa bastante espesa. Dejar cocer suavemente durante algunos minutos,
añadir una yesca de perifollo picado. Sazonar con cayena y un chorrito de salsa
inglesa. Para acompañar pollos y pichones a la parrilla.
Escoffier. Por lo general esta salsa
se prepara en pequeñas cantidades y en el momento preciso. 4 pax. Reducir a dos
tercios tres decilitros de vino blanco al que se habrá adicionado dos
cucharadas de escalonias finamente picadas. Agregar dos decilitros de salsa
media glasa, dejar hervir unos minutos y avivar la salsa con una punta de
pimienta de Cayena o de pimiento picante picado. Especial para pollos, pichones
y pies de cerdo. Como variante se puede sazonar con una cucharada de
mantequilla de anchoas, una cucharadita de salsa Perrins o de mostaza inglesa.
Práctico. Diable. (Devilled Sauce.) (Inglesa.) Reducir vinagre con escaluñas picadas.
Mojar con Demi-glace y un poco de puré de tomate. Ponerla a punto con un poco
de Harvey sauce y Escoffier sauce. Bastante cayena.
Diable. Reducción de
½ vino blanco, ½ de vinagre, con
escaluñas picadas. Mojar con Demi-glace. Pasar. Mucha cayena. Un poco de perejil
al servir.
Bercy.
(C) Escaluñas picadas rehogadas a la manteca. Mojar vino blanco. Reducir.
Agregar glace de viande, un poco de Demi-glace y jugo de limón. Montar a la
manteca. G. Dados de tuétano y perejil picado. (Para los asados.)
Beefsteak: Cebolla picada fina,
rehogada; vaso de Madera. Glace de viande. Fines-herbes y jugo de limón.
Montada a la manteca.
Bigarrade: Reducción de vino de Oporto y jugo de naranja.
Mojar con fondo de pato reducido. Poner a punto con glace de viande, manteca,
Curaçao y un poco de jalea de frambuesa o de albaricoques. Agregar cáscaras de
naranja y un poco de cáscaras de limón cortadas en juliana bien fina
blanqueadas.
Bonnefoy: Salsa Bordalesa al vino
blanco.
Biron: Reducción de vino tinto,
Demi-glace y dados de trufa.
Chambord: Rehogar una mirepoix de
cebolla, diente de ajo, tomillo, laurel, hoja de apio, granos de pimienta.
Agregar cabezas de pescado (sí es posible una de salmón). Mojar con un vaso de
coñac y vino tinto. Reducir. Mojar de
nuevo con Demi-glace y fumet de pescado. Cocer a punto y sazonar. Pasar y
concluirla con manteca de langosta y jugo de limón.
Champignons: (A). Reducción de fumet de champignons y vino Madera. Mojar Demi-glace. Agregar
champignons salteados a la manteca, con escaluñas picadas. Poner a punto con
glace de viande y manteca.
(B). Reducción de vino
madera o jerez. Mojar con crema de leche y un poco de glace de viande. Agregar
champignons salteados con escaluñas picadas. Reducir. Poner a punto con
manteca.
Chasseur: Rehogar escaluñas picadas a
la manteca. Mojar vino blanco. Reducir. Agregar tomate concassée, champignons
salteados y glace de viande. Reducir. Poner a punto con manteca. Perejil
picado.
Châteaubriand: Rehogar
escaluñas picadas a la manteca. Agregar laurel, tomillo, hojas de estragón,
pimienta en grano y peladuras de champignons. Mojar con fondo de ternera y
glace de viande. Reducir y pasar. Concluirla fuera del fuego con manteca.
Estragón y perejil picado.
Chaud-Froid oscura: Demi-glace
adicionada de gelatina reducida a consistencia, perfumada al Madera y trufa.
Chevreuil. Mirepoix
de legumbres y desperdicios de caza rehogada a la manteca. Mojar con vino
tinto. Reducir. Añadir salsa Poivrade. Pasar a la estameña. Concluir con punta
de cayena y un poco de azúcar.
Chevreuil. (Roebuck sauce.) (Inglesa.) Cebolla
y jamón cortado en paisana rehogado a la manteca hasta tomar color. Bouquet.
Mojar con un vaso de vinagre. Reducir. Añadir Demi-glace. Retirar el bouquet.
Ponerla a punto con un vaso de Oporto y jalea de grosella.
Colbert: Glace de viande liviana montada con manteca.
Estragón picado.
Cressonnière: Reducción
de escaluñas, vino blanco, fondo de ternera, extracto de carne. Montar a la
manteca. Guarnición: hojas de berros blanqueadas.
Criolla: Portuguesa cortada en dados.
Demi-glace: Fondo
de ternera ligado y perfumado al Madera al supremo grado de perfección.
Diane:
Salsa Poivrade, adicionada de crema, trufa y blanco de huevo duro.
Duxelles: Cebolla y escaluñas picadas
rehogadas a la manteca. Mojar al vino blanco. Reducir. Añadir ½ Demi-glace, ½
salsa de tomate y una cantidad de Duxelles seca. Perejil.
Bocuse. En una cucharadita de mantequilla puesta a
calentar en una sartén, hacer tomar algo de color, a fuego muy suave, una
cucharadita de escalonia picada. Agregar 100 g de champiñones blancos y de
carne prieta, limpiados y lavados muy rápidamente en agua, y picados muy
menudos.
Hacer que se evapore a
fuego muy vivo la humedad de la escalonia y de los champiñones; bañarlos con ½
vaso de vino blanco seco y dejar reducir casi totalmente. Verter 3 dl de
semiglaseado o de salsa española o de un buen fondo de ternera; en este último
caso, completar con 2 cucharadas de salsa de tomate, ligada y muy concentrada.
Dejar cocer durante
unos minutos hasta que quede reducida a 2/3 de su volumen.
Con la brasera
apartada del fuego, echar mantequilla fresca en abundancia; agregar una
cucharadita de perejil picado y comprobar el sazonamiento.
Pellaprat. Para un cuarto litro: dos cucharadas de perejil;
perifollo y estragón picados; un dl vino blanco; dos dl media glasa; 50 gr
champiñones cocidos. Cocción: cinco minutos.
Reducir en dos tercios
el vino blanco, con las hierbas. Añadir la media glasa hacer hervir algunos
instantes y pasar por el tamiz. Echarle los champiñones, cortados finos y
preparados en duxelles. Darle unos hervores. Añadir en último momento una
cucharada de perejil picado. Para acompañar pequeñas piezas de carne, aves y
huevos.
Esmeralda: Azúcar punto caramelo
rubio. Mojar ½ vino blanco, ½ vinagre. Reducir y añadir Demi-glace. Poner a
punto con manteca. (Para jamones.)
Estragón: Demi-glace a la esencia de estragón. Estragón
picado.
Financière: Salsa Madera, a la esencia de trufas. Especial para las guarniciones de
este nombre.
Pellaprat. Para dos
dl: tres dl media glasa; cinco cl esencia de trufa.
Reducir la media glasa
en un cuarto e incorporar la esencia de trufa fuera del fuego. Pasar por tamiz
fino. Se utiliza como ligazón para las guarniciones a la financiera, volovanes
timbales.
Fines Herbes (A). Infusión
de fines-herbes al vino blanco. Añadir Demi-glace, fines-herbes picadas y jugo
de limón.
Genevoise. Salsa Chambord a la esencia
de anchoa.
Godard. Reducción al vino blanco con
una mirepoix al jamón. Mojar con Demi-glace y esencia de champignons. Cocer 10
minutos. Pasar. Especial para la guarnición “Godard”.
Grand-Veneur. Salsa Poivrade a la esencia de venado (caza de monte), adicionada de un
poco de marinada de la pieza mezclada con un poco de sangre de liebre. No debe
hervir. Pasar.
Pellaprat. Es una
salsa pimentada clara, a la cual se añade en último momento algunas cucharadas
de sangre de liebre para ligarla. Tenerla un rato cerca del fuego para asegurar
la cocción de la sangre, pero sin dejarla hervir. Sírvase picante. Acompaña el
lomo de liebre o la silla de corzo.
Gourmet. Salsa Chambord, montada a la manteca de Homard o Langosta con guarnición de
colas de langostinos, quenelles y trufas.
Gratín. (A). Reducción
de vino blanco con escaluñas picadas. Añadir Duxelles seca, Demi-glace al fumet
de pescado. Cocer. Perejil picado. Especial para los pescados de este nombre.
Hachée (A). Cebolla
y escaluñas picadas y rehogadas a blanco. Mojar con vinagre. Añadir Demi-glace
atomatada. Cocer. Guarnición de jamón, alcaparras, perejil y un poco de
Duxelles seca.
Huîtres (C). Oscura Brown-Oyster sauce. Demi-glace
con ostras.
Hussarde. Cebolla y escaluñas
rehogadas a la manteca. Mojar con vino blanco. Reducir. Añadir Demi-glace,
tomate, jamón crudo, dos dientes de ajo picados y bouquet. Cocer 25 minutos.
Retirar el jamón y picarlo fino. Pasar la salsa a la estameña o al chino.
Agregar el jamón. Raifort rallado y perejil.
Italienne. Duxelles
seca alargada con Demi-glace perfumada al Madera. Especial para los tallarines,
raviolis, espaguetis.
Jus Lié. Fondo de ternera oscuro
ligado a la fécula de patata.
Lyonnaise. Cebolla picada, estofada a
la manteca. Mojar: ½ vino blanco, ½ de vinagre. Reducir y añadir Demi-glace.
Pasar a la estameña.
Pellaprat. Para un
cuarto litro: 50 gr cebollas; un dl vino blanco; dos dl media glasa; 30 gr
mantequilla. Cocción: 15 minutos.
Saltear con
mantequilla las cebollas finamente sin que tomen color, mojar con el vino
blanco, reducir a la mitad y añadir la media glasa. Dejar cocer unos diez
minutos, servir esta salsa con carne o legumbres, en particular con alcachofas;
según los gustos, se pasa la salsa o se sirve con las cebollas.
Madère. Demi-glace perfumada al vino
de Madera.
Marchand de vin. Rehogar
escaluñas cortadas en juliana fina a la manteca. Mojar vino tinto. Reducir.
Añadir glace de viande. Montar fuera del fuego a la manteca y jugo de limón.
Perejil picado.
Matelote. (A). Reducción
de fumet de pescado al vino tinto. Recortes de champignons. Añadir Demi-glace.
Pasar a la estameña. Manteca y punta de cayena.
Pellaprat. Para un cuarto
litro: medio litro de vino tinto; 350 g espinas y desperdicios de pescado; tres
escalonias; una cebolla grande; 50 gr recortes de champiñones; 75 g de
mantequilla; 15 g harina. Cocción: 15 minutos.
Reducir a la mitad
medio litro de un buen vino tinto, en el cual se habrán hecho hervir espinas y
desperdicios de pescado, con escalonias, cebollas, ramillete, sal pimienta en
grano y los recortes de champiñones. Reducirlo a un cuarto de litro, pasar y
ligar con 25 gr de mantequilla trabajada con 15 gr de harina. Dar uno o dos
hervores y añadirle mantequilla. Colar. Esta salsa se sirve con pescados.
Miroton. Cebolla picada rehogada a
la manteca. Mojar con un poco de vinagre. Reducir. Añadir Demi-glace, un poco
de tomate y mostaza.
Moelle. Como la Bordalesa pero más
cargada de dados de tuétano.
Moscovite. Salsa Poivrade con una
infusión de granos de ginebra. Vaso de Málaga. Guarnición: piñones o almendras
tostadas y cortadas. Uva de Corinto. Especial para venado.
Pellaprat. Es una
salsa pimentada con una infusión de bayas de enebro picadas con un poco de
marinada. Añadir piñones tostados o almendras tostadas. Se pueden añadir
también, pasas de Corinto bien lavadas. Sirve para acompañar la caza.
Oignons. (B). (Oscura). Cebolla
picada muy fina, rehogada a la manteca; bouquet. Mojar con Demi-glace,
adicionada de salsa Perrins.
Palace. Reducción de escaluñas
picadas finas rehogadas a la manteca, pimienta blanca en grano, estragón, coñac
y Oporto. Agregar extracto de carne y retirar del fuego. Montar con manteca fresca
en pomada y jugo de limón. Sazonar y adicionar hojas de estragón blanqueadas.
Pasas de uvas. Poner
un poco de azúcar en un sautoir, darle punto de caramelo rubio. Reducción de ½
vino blanco y ½ de vinagre. Mojar con Demi-glace. Agregar pasas de uvas puestas
a remojo en agua templada de antemano. Poner a punto con manteca. (Para jamón,
lengua, hígado de ternera, etc., etc.)
Piñas. Reducción de jugo de piñas y
jerez. Añadir Demi-glace. Poner a punto con manteca. Guarnición: dados de
piñas. (Para jamones.)
Piquante. Escaluñas picadas rehogadas
a la manteca. Mojar: ½ vino blanco, ½ vinagre. Reducir. Añadir Demi-glace,
pepinillos, perejil y estragón picado. Pimienta molida.
Poivrade ordinaria. Una
mirepoix al aceite; zanahoria, cebolla, ajo, tomillo, laurel y pimienta
aplastada. Mojar ½ vinagre, ¼ de marinada. Reducir casi del todo. Añadir
Demi-glace. Cocer. Pasar con presión. Ponerla a punto con un poco de manteca.
Poivrade para caza. Proceder
como la anterior. Añadir a la mirepoix algo de recortes de caza de pelo.
Ponerla a punto con un poco de fondo de caza y manteca.
Porto. Demi-glace perfumada al vino
Oporto.
Porto. (Port Wine sauce). (Inglesa.) Reducción
de vino Oporto con escaluñas picadas, tomillo. Añadir jugo y corteza de
naranja, sal y punta de cayena. Pasar y agregarlo a un fondo de ternera ligado.
Portugaise (B). Cebolla
picada rehogada al aceite. Añadir tomate crudo concassée, sal, pimienta, salsa
de tomate clara, glace de viande, punta de ajo y perejil cortado grueso.
Réforme. ½ de Poivrade, ½
Demi-glace. Guarnición de una juliana corta compuesta de blanco de huevo duro,
pepinillos, champignons, trufa y lengua escarlata.
Régence (A). Mirepoix
con peladuras de trufa. Mojar con vino del Rhin, reducir. Añadir Demi-glace.
Pasar.
Romaine. Caramelo rubio diluido con
un poco de vinagre. Agregar Demi-glace y fondo de caza. Reducir. Pasar y
agregar piñones tostados. Uvas pasas de Esmirna y de Corinto remojadas.
Pellaprat. Para medio
litro: 50 gr azúcar en polvo; un dl vinagre; 20 gr pasa Corinto; 20 gr pasas de
Esmirna; 30 gr piñones o almendras; cuatro dl media glasa; dos dl fondo oscuro
o de caza. Cocción: 15 minutos.
Con el azúcar hacer un
caramelo sin demasiado color, sin agua, en una cacerola que no sea estañada.
Añadir el vinagre y reducir a fondo. Agregar la media glasa, y el fondo oscuro.
Dejar cocer 15 minutos y después completar otros siete y ocho minutos antes de
servir, con las pasas lavadas con agua caliente y los piñones y almendras
tostadas. Se sirve con lengua de vaca, ternera braseada o caza.
Rouennaise. Salsa
Bordelesa liviana al puré de hígados de pato crudos. Calentar sin hervir dentro
de la salsa. Pasar por el chino. Ponerla a punto con pimienta, jugo de limón y
una reducción de vino tinto con escaluñas picadas.
Pellaprat. Para tres
dl: dos escalonias; dos dl vino tinto; dos hígados de pato¸20 gr mantequilla;
un cuarto litro media glasa. Cocción: 15 minutos.
Saltear con
mantequilla las escalonias cortadas finas. Añadir el vino tinto. Reducir hasta
quedar casi seco. Mojar esta reducción con la media glasa, añadir el perejil
picado. Dejar cocer lentamente. Al momento de servir, añadir los hígados de
pato crudos pasados por un tamiz. Sazonar fuertemente. No dejar que hierva de
nuevo. Se sirve con pato a la ruanesa.
Salmis. Hacer dorar una miripoix con
carcasa de aves de caza. Mojar con vino tinto y Madera. Reducir. Añadir
Demi-glace y bouquet. Cocer y pasar al cedazo. Luego a la estameña. Ponerlo a
punto con un poco de fondo de caza y manteca.
Smitane. Cebolla picada, dorada a la
manteca. Mojar con crema algo agria. Añadir un poco de hinojo picado, sal y
cayena. Reducir. Pasar y concluirla con una cucharada de glace de viande y un
jugo de limón.
Solferino. Pasar por el cedazo fino
unos tomates bien maduros. Cocer el puré y agua de los mismos. Añadir glace de
viande, punta de cayena y jugo de limón. Montar fuera del fuego con manteca de
escaluñas y concluirla con estragón picado. Especial para las carnes asadas.
Tortue. Hacer hervir Demi-glace y
agregar un poco de salsa de tomate y hierbas a Tortue, que son: salvia,
mejorana, romero, tomillo, laurel, albahaca, hojas de perejil, peladuras de
champignons, granos de pimienta aplastados. Tapar y cocer. Pasar y ponerla a
punto con un vaso de Madera. Esencia de trufa y punta de cayena.
Viennoise. Salsa Poivrade montada a la
crema, adicionada de corteza de naranja y limón cortada en juliana y
blanqueada.
Zíngara. Salsa Demi-glace y tomate.
Guarnición: una juliana de jamón, lengua escarlata, champignons y trufas. Punta
de cayena. Especial para ternera y ave.
2.1.2 Salsa velouté.
El nombre que recibe la
velouté viene marcado por el tipo de fondo que empleemos para su elaboración,
ave, pescado, caza, etc.
Velouté es un término
francés que significa “aterciopelada”; esto significa que la salsa debe ser
suave.
Su calidad vendrá
marcada por la calidad del fondo que empleemos.
Fases. Fondo blanco 1 l, mantequilla 100 gr, harina
100gr, sal y pimienta blanca molida.
Poner la mantequilla
al fuego y cuando se derrita añadir la harina. Rehogar unos minutos hasta
conseguir un roux rubio bien cocinado. Dejar enfriar éste mientras se calienta
el fondo. Añadir al roux frío el fondo hirviendo y remover. Dejar hervir unos
diez minutos teniendo precaución de que no se agarre. Sazonar. Colar por un chino
y reservas en recipiente de material inalterable con mantequilla por encima.
Resultados. La salsa debe resultar suave con el punto necesario de espesor
dependiendo de su posterior utilización (de 60 a 100 gr de harina por litro.)
Aplicaciones. Para elaboraciones de salsas derivadas y cremas.
Alternativas. Puede no sazonarse en el momento de la
realización.
Según el diccionario
gastronómico de Carlos Delgado, Velouté es una salsa base que utiliza un caldo
blanco ligado con un fondo rubio lo más claro posible.
Para Vicente Regidor,
es una salsa de color blanco y aterciopelada, confeccionada con un roux rubio
de 20 a 60 g por litro de caldo de ave, fumet, carne, caza, etc., según su
aplicación posterior, y que está condimentada con sal y pimienta blanca. El caldo
se echa hirviendo sobre el roux frío, a la vez que se va removiendo hasta que
reanuda el hervor de nuevo, reservando una parte de caldo hasta haber
comprobado el espesor.
La calidad de la salsa
viene determinada por el caldo de mojado, el sabor de la mantequilla, el color
y el espesor necesario, según su aplicación posterior.
Bocuse. Salsa velouté o salsa blanca. Se obtiene esta salsa mezclando un roux
dorado con un fondo blanco o calco blanco, a razón de 125 g de roux por l de
fondo.
Proceder según la
técnica indicada para la elaboración de los roux. Dejar cocer a fuego suave por
espacio de hora y media y espumar tal como se ha reseñado en la receta de la
salsa española.
La consistencia y el
sabor de dicha salsa deben responder al nombre de “velouté”, que le ha sido
atribuido con justicia debido a esa característica especial.
Pellaprat. Velouté. 70 gr mantequilla; 60 gr de harina; 1 l y medio de fondo blanco.
Cocción 35 minutos. Con la mantequilla y la harina hacer un rubio. Cocer a
fuego lento cuatro o cinco minutos sin dejar que tome color. En cuanto el rubio
se ponga esponjoso, mojar con el fondo blanco. Remover hasta que hierva. Dejar
cocer lentamente durante 30 minutos sin remover.
Escoffier. Salsa Velouté simple. Para obtener una buena salsa velouté, proceder como
se ha indicado para la salsa Española, reemplazando el rubio oscuro por un
rubio claro, teniendo siempre en cuenta las mismas proporciones. El Velouté
debe tener una ebullición muy lenta, para que pueda obtener cierta
transparencia.
Tiempo de cocción: una
hora y media. Después de colarla ponerla en una terrina, removiéndola
continuamente hasta que esté casi fría. Puede utilizarse para muy diversos
usos.
Mientras se produce la
cocción y desmembración de la salsa conviene, de vez en cuando, retirar la
grasa y la espuma que suben a la superficie.
En el Velouté se puede
prescindir del mirepoix que indicamos para la salsa española.
Una cazuela más alta
que ancha es la forma más indicada para la cocción de estas salsas, siendo muy
aconsejable que por medio de algún cuerpo duro se levante la cazuela por uno de
sus lados, de manera que el fondo no se apoye totalmente sobre el fuego.
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Práctico. Velouté de ternera o ave. Roux blanco a la manteca diluido con fondo blanco. Lisarla con el batidor. Bouquet y recortes de champignons frescos; dejar cocer dos horas y media. Pasar a la estameña y si hay que guardarla, revolverla de vez en cuando hasta estar completamente fría. Si es de pescado reemplazaremos el fondo por un fumet.
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Salsa
derivadas de la Velouté.
-Salsa Suprema. A la Velouté se le añade la nata líquida, para
terminar adicionando mantequilla fresca o nata. Para aves y huevos.
Bocuse. Segundo
derivado de alta perfección de la salsa velouté, enriquecida con idéntica
cantidad de fondo de ave reducido a una cuarta parte de su volumen y con una
cuarta parte de crema de leche fresca con respecto a la totalidad.
Por ejemplo: echar un
l de velouté y un l de fondo de ave reducido a ¼ de su volumen, en una sartén;
Luego, llevar a ebullición a fuego muy vivo, removiendo constantemente con una
espátula. Ir incorporando paulatinamente, a medida que se vaya realizando la
reducción, 2 dl de crema de leche fresca. Se debe proseguir la reducción hasta
que la masa de velouté, de fondo y de crema no tenga ya más que 1/3 de su
volumen total. Llegado este momento, pasar la salsa por la estameña, comprobar
el sazonamiento y finalizar la preparación removiendo e incorporando un dl de
crema de leche fresca y 100 g de mantequilla fresca.
La característica de dicha
salsa es la de ser ligera, brillante y suculenta.
Pellaprat. Para un
litro: 70 gr mantequilla; 60 gr de harina; un litro de fondo de ave; dos yemas
de huevo; cinco dl crema fresca; 50 gr de mantequilla. Cocción 30 minutos.
Proceder como para la velouté. Después de cocer espumar, ligar con las dos
yemas, la crema, e incorporar la mantequilla fresca.
Escoffier. A un litro
de velouté de ave, reducido a su punto, adicionar dos dl de crema bien fresca,
dejarlo cocer algunos momentos y luego colar la salsa por una estameña.
Esta salsa se prepara
en último momento, y al mismo tiempo que la crema, se le pueden agregar algunas
cucharadas de gelatina de carne, preparada con un fondo blanco de ternera y
ave.
Práctico. Sûpreme.
Velouté de ave montada a la crema adicionada de fumet de champignons. Reducir a
punto. Pasar a la estameña. Esta salsa debe ser blanca al extremo y de un sabor
delicado.
-Salsa Aurora. Añadir a la velouté reducida, puré de tomate y
montar con mantequilla. Para carnes blancas, huevos y aves.
Pellaprat. Un litro
salsa velouté; un cuarto litro salsa de tomate; 100 gr de mantequilla. Hervir
la salsa velouté, incorporar la salsa tomate y montar lentamente con la
mantequilla. Para carnes blancas, aves y huevos.
Para elaborar una
Aurora magra utilizar una velouté de pescado.
Escoffier. Es una
velouté al que se adiciona puré de tomate con mucho color, en la proporción de
tres cuartos de velouté por uno de puré
de tomates. En el momento de servirla se agregan 100 gramos de mantequilla por
litro de salsa.
Otra forma de preparar
esta salsa consiste en fundir en una cacerola 2 cucharadas de mantequilla,
mezclar una cucharadita de pimentón rojo dulce, calentar durante algunos
segundos e incorporar un litro de bechamel a la crema. Es muy importante no confundir el pimentón dulce con la cayena.
Práctico. Salsa
Suprema adicionada de un poco de puré de tomate.
-Salsa Bercy.
Chalotas picadas
sudadas en mantequilla, vino blanco reducido, velouté de pescado, mantequilla y
perejil picado. Sal, pimienta y zumo de limón. Para pescados.
Bocuse. (Para
pescado). Poner a rehogar durante 15 minutos en mantequilla, y sin que lleguen
a tomar color, 2 cucharaditas de escalonias picadas muy menudas; bañar con 2 dl
de vino blanco seco y con 2 dl de “fumet” de pescado. Reducir a los 2/3 del
volumen y agregar ¾ de litro de velouté al “fumet” de pescado.
Hacer hervir durante
10 minutos y con la brasera apartada del fuego, echar finalmente 100 gr de
mantequilla fresca. Realzar la sazón con pimienta recién molida. En el momento
de servir, espolvorear con una buena pulgarada de perejil picado.
Pellaprat. Para tres
dl: un dl vino blanco; una cucharada de escalonias picadas; 50 gr mantequilla;
tres dl velouté; el zumo de un limón. Cocción: unos 15 minutos.
Mezclar las escalonias
con la mantequilla sin colorearlas. Rehogarlas en vino blanco y dejar reducir a
la mitad. Añadir el velouté, darle varios hervores. Poner la mantequilla al
fuego sazonándola con sal, pimienta, perejil picado y jugo de limón.
Práctico. (A).
Escaluñas picadas rehogadas a blanco con manteca; mojar vino blanco, crema de
leche y extracto de pescado. Reducir. Agregar un poco de velouté de pescado.
Montar con manteca cruda fuera del fuego. Perejil picado. (Para pescados.)
(B). Reducir
escaluñas, vino blanco, crema de leche y extracto de pescado. Agregar 6 yemas
por litro de salsa. Trabajar sobre la plancha en pomada. Montar a la manteca
fuera del fuego. (Para glasear pescados.)
-Salsa vino blanco. Existen varias fórmulas:
El pescado se pocha con el vino
blanco o cava.
Holandesa más la reducción del
pochado del pescado.
Mezcla de velouté de pescado y salsa
holandesa.
Reducción del pochado de pescado más
velouté a la que se añaden yemas montadas.
Se puede sustituir la velouté por
nata líquida a la que se añaden las yemas.
Para pescados glaseados.
Bocuse. (Para
pescado). Preparar ½ l de velouté al “fumet” de pescado; agregarle un dl de
“fumet” de pescado y ½ vaso de vino blanco seco, reducidos a una cucharada de
líquido; ligar con 2 yemas de huevo batidas con 2 cucharadas de crema de lecha
fresca y 2 cucharadas de jugo de cocción de champiñones; pasar la salsa por la
estameña, volver a echarla en una brasera y, sin dejar de remover un momento,
calentarla hasta que esté a punto de hervir; agregar, con la brasera apartada
del fuego, 100 gr de mantequilla fresca.
Pellaprat. Para un
litro: un litro de velouté de pesado; dos dl fumet de pescado; cuatro yemas de
huevo; 200 gr mantequilla. Mezclar al velouté de pescado, el fumet y las yemas
de huevo. Reducir en una tercera parte. Montar con mantequilla.
Escoffier. Se puede
preparar de dos maneras distintas.
1.ª A medio litro de
salsa velouté hecha con un fumet de pescado muy reducido, agregarle en plena
ebullición 3 yemas de huevo diluidas en frío con algunas cucharadas de fumet de
pescado. Montar la salsa agregándole poco a poco 300 gr de mantequilla fina.
2.ª Reducir a la mitad
un decilitro y medio de fumet de pescado. Agregar 4 ó 5 yemas de huevo y montar
la salsa con 500 gr de mantequilla fina, como se hace en la salsa Holandesa.
Práctico. Vin Blanc.
(A). Velouté de
pescado ligado con yemas. Agregar reducción de fumet de pescado, crema de leche
y vino blanco. Montar a la manteca.
(B). Mitad velouté de
pescado y mitad salsa Holandesa, adicionada de reducción de vino blanco, fumet
de pescado y crema de leche.
(C). Reducir vino
blanco, fumet de pescado y crema de leche. Agregar yemas. Trabajar en pomada sobre la pomada sobre la plancha.
Montar fuera del fuego con manteca.
-Salsa Chaud-froid.
Velouté con gelatina.
Para napar platos fríos. Puede ser de color rojizo si se elabora con salsa
Aurora, de color verde añadiendo una reducción de vino blanco con hierbas
aromáticas frescas y el caldo de espinacas. Las veloutes pueden ser tanto de ave, carne o pescado.
Bocuse. Salsa
Chaud-froid blanca. Ingredientes para ½ l: 75 gr de roux dorado; ¾ de l de
caldo de ave sin coloración y muy sustancioso; 25 g de mondaduras o de pies de
champiñones; 3 dl de gelatina blanca; 3 dl de crema de leche fresca.
Método: Preparar el
roux con mantequilla y harina a partes iguales: desleírlo con el caldo de ave;
llevar a ebullición; agregar los champiñones y dejar cocer a fuego suave por
espacio de una hora. Espumar, de vez en cuando, con todo cuidado.
Se puede sustituir
ventajosamente la preparación indicada por idéntica cantidad de un buen
velouté.
Echar en una sartén 2
dl de crema de leche fresca y la salsa cocida en su punto. Reducir a fuego
vivo, agregando gelatina y removiendo continuamente con una espátula.
Cuando la salsa haya quedado reducida a
½ l, apartar la sartén del fuego, echar en ella un dl de crema de leche fresca
espesa y pasarla por la estameña, recogiéndola en un recipiente de barro
vidriado. Dejar que se enfríe algo, removiendo frecuentemente con el fin de
impedir la formación de una fina película en la superficie y, por ende, la
formación de grumos. Antes de que adquiera la consistencia de la gelatina,
utilizar dicha salsa para cubrir los platos a los que está destinada.
Pellaprat. Chaud-froid
blanco. (lo considera salsa fría). Para un litro: tres cuartos de litro de
velouté; seis dl de gelatina de ternera o ave; tres dl de crema.
Poner el velouté en
una cacerola, a fuego fuerte. Reducir con la espátula, añadiendo la gelatina y
la crema poco a poco. Reducir una tercera parte, verificar el sazonado y pasar
por un tamiz. Dejarlo enfriar y napar las piezas que se han de presentar en
chaud-froid.
Para la chaud-froid
aurora añadiremos 2 dl de puré de tomate.
Para la Vert-Pré
pondremos en infusión durante diez minutos en un poco de vino blanco, tres o
cuatro gr de perejil, perifollo, cebollinos, estragón y berros picados. Pasar
la infusión por el tamiz y agregarlo a una salsa chaud-froid blanca.
Escoffier. Salsa
chaud-froid blanca corriente. Proporciones para un litro: 3 cuartos de litro de
velouté normal, 6 ó 7 decilitros de gelatina de pies de ternera, 3 dl de crema.
Poner el velouté en
una salteadora de fondo grueso, calentarlo a fuego vivo moviendo continuamente
con la espátula apoyada sobre el fondo, y disolviendo en ella toda la gelatina
así como un tercio de la crema. El conjunto deberá quedar reducido en más de
una tercera parte.
Comprobar la sazón y
la consistencia, pasarla por la muselina, agregar poco a poco el resto de la
crema y dejarla de lado hasta que se enfríe lo suficiente para poder napar con
ella las viandas a que se destine.
Práctico. Chaud-froid
blanca. (A). Velouté adicionada de gelatina reducida a consistencia, y a medida
que reduce agregarle un poco de crema de leche. Pasar a la estameña.
Blanquearla con más crema y dejarla enfriar revolviéndola con un batido hasta
consistencia para napar las piezas destinadas a este objeto.
(B). La misma
preparación sin crema. Pasar y guardar al frío. Esta Chaud-froid se blanquea a
medida que se necesita, se hace calentar y se le agrega la crema.
En caso de exigencias
económicas se puede marcar la Chaud-froid con leche, igual que una bechamel
adicionada de gelatina.
Práctico.
Albufera. Salsa Suprema adicionada glace de viande y manteca de pimientos
colorados.
Allemande. (Alemana.) Velouté de ave y ternera ligada con yemas.
Perfumada con hierbas aromáticas, jugo de limón. Poner a punto con crema de
leche y manteca. Pasarla a la estameña.
Bocuse. Salsa
alemana, denominada también salsa parisiense.
De igual forma que el
“demi-glace” deriva de la salsa española, la salsa alemana (que, por cierto, no
es de origen alemán, como tampoco la salsa española es de origen español)
procede de la salsa Velouté.
La salsa alemana es,
por tanto, salsa velouté a la que se agrega una ligazón a base de yemas de
huevo. Para ligar correctamente una salsa alemana, conviene proceder de la
forma siguiente:
Método:
Llevar a ebullición un
l de salsa velouté, reducirla hasta que adquiera la consistencia de una crema
poco fluida, removiendo de continuo con una espátula, la salsa se tornará
brillante y debe quedar adherida a la espátula, es decir, cubrirla con una capa
consistente. Preparar, por otra parte, en un bol o en una ensaladera pequeña, 5
yemas de huevo, una pulgarada de pimienta recién molida, una raspadura de nuez
moscada, 4 cucharadas del blanco de cocer los champiñones, ½ cucharadita de
zumo de limón, unas cucharaditas de mantequilla fresca.
Batir tanto las yemas
de huevo como los elementos que han sido incorporados; verter en la mezcla un
poco de velouté y luego, manteniendo la preparación apartada del fuego, verter
en ella la ligazón muy lentamente, en tanto que se bate enérgicamente al
mezclar. Calentar a fuego suave hasta la ebullición, y ello sin dejar de batir
un solo instante.
Apartar inmediatamente
el recipiente del fuego; pasar la salsa por la estameña, recogerla en una
terrina y seguir removiendo hasta que se
haya enfriado por completo.
Cuando haya llegado el
momento de su utilización, comprobar el sazonamiento e incorporarle, con la brasera
apartada del fuego, 100 g de mantequilla fresca por cada l de velouté del
principio. Después de ligada, la salsa no debe hervir, salvo en caso de
necesidad de conservación.
Pellaprat. Salsa
alemana. Para medio l: cuatro yemas de huevo; un l
fondo blanco; un l velouté; un dl caldo de champiñones; un chorrito de jugo de
limón. Cocción 15 minutos.
Echarlo todo en una
cacerola y mezclar con el batidor. Poner a fuego vivo, y agitar vigorosamente
con la espátula. Dejar que reduzca, hasta que la salsa nape bien la espátula.
Incorporar 100 g de mantequilla fresca. Pasar por un tamiz.
Escoffier. Salsa
rubia o salsa parisién. También llamada salsa alemana.
Es un velouté
corriente, ligado con yemas de huevo.
Proporciones para un
litro: un litro de velouté corriente.
Elementos auxiliares:
5 yemas de huevo, medio litro de fondo blanco, una pulgarada de pimienta
molida, una pizca de nuez moscada rallada, algunas cucharadas de champiñones
recién hervidos. (no emplear jamás champiñones en conserva.)
Preparación: mezclar
en una salteadora de material grueso las yemas, los champiñones, el fondo
blanco, la pimienta y la nuez moscada, agitándolo con un batidor. Agregar el
velouté y dejar que rompa a hervir, manteniendo una ebullición rápida hasta que
se haya reducido en más de una cuarta parte, moviendo continuamente con una
espátula y teniendo la precaución de presionar en el fondo de la cacerola, para
evitar que la salsa se adhiera.
La salsa estará a
punto en cuanto nape bien la cuchara, y entonces se pasara a una terrina, para
su conservación.
Nota. Agitar la salsa
ligeramente, a fin de evitar el que repose antes de su casi total enfriamiento.
Para que no se forme nata basta con cubrir la superficie con un poco de
mantequilla.
Anchois. Salsa Normanda montada a la manteca de anchoa. Guarnición de dados de
filetes de anchoa.
Aromates. (Aromatic Sauce.) (Inglesa.) Velouté ligado con un Roux color rubio, con una
infusión de: tomillo, albahaca, sarrieta, mejorana, salvia, cebollina,
escaluñas picadas, granos de pimienta. Pasar y agregar perifollo y estragón
picado. Jugo de limón.
Aurora para pescados. Velouté de pescado atomatada.
Chaud-froid amarilla. Proceder de igual forma que la blanca.
Reemplazar la velouté por salsa Alemana y menos crema.
Chaud-froid Aurora. Chaud-froid blanca, adicionada de un poco de
puré de tomate.
Canotière. Reducir vino blanco, escaluñas, fumet de pescado bien aromatizado de
hierbas. Agregar Velouté de pescado, cocinar algunos minutos todo. Pasar. Poner
a punto con crema de leche y manteca. Sazonar. Punta de cayena.
Câpres (A). (Caper Sauce.) (Inglesa.) Salsa Sûpreme adicionada de alcaparras.
Céleri. (Céleri sauce.)(Inglesa.) Apio
cocido con agua, una cebolla con un clavo de olor y un poco de manteca. Pasar
por el cedazo los apios y la cocción. Reducir. Agregarlo a una salsa Crema o
Sûpreme.
Chivry. Velouté de ave con la infusión siguiente: perifollo, estragón, perejil,
cebollina, pimpinela. Vino blanco. Pasar. Concluirla fuera del fuego con
manteca Chivry. (Perejil, escaluñas, estragón, cebollina, pimpinela fresca.
Todo picado y blanqueado. Escurrirlo bien con un repasador. Luego machacarlo y
agregar manteca. Pasarlo por el cedazo.)
Pellaprat. Para medio
litro: medio litro de salsa suprema; cinco cl vino blanco; dos gr estragón; dos
gr perifollo; dos gr berros; dos gr cebollino; diez gr espinacas.
Hacer una infusión de
las hierbas con vino blanco. Reducir a
la mitad, y añadirlo a la salsa suprema. Colar. Completar la salsa con un poco
de espinacas, perifollo y estragón cocidos y pasados por un tamiz, para obtener
un color verde tierno.
Crème a la Inglesa. (Cream Sauce) Velouté a la esencia de champignons, bouquet y
una cebolla. Pasar y ligar a la crema.
Crevettes. Velouté de pescado
adicionada de crema. Agregarle fuera del fuego manteca de langostinos, cayena y
colas de langostinos o camarones.
Diplomate. Salsa Normanda adicionada de manteca de langosta. Guarnición: dados de
trufa y de langosta.
Écossaise. Salsa Normanda adicionada de una Brunoise gruesa de zanahorias, trufas,
apio. Estofado todo a la manteca.
Homard. (A). Salsa
Diplomate sin guarnición.
Hongroise. Cebolla picada rehogada a la manteca y paprika. Mojar con vino blanco,
bouquet. Reducir 2/3. Añadir salsa Suprema.
Ivoire. Salsa Suprema ala glace de viande, color claro. (Marfil.)
Joinville. Salsa Normanda adicionada de manteca de cangrejos de río y de
langostinos. Según el empleo, guarnición de una juliana de trufas bien negras.
Livonienne.
Velouté al fumet de pescado montado a la manteca. Guarnición: juliana de
trufas, zanahorias, apio y champignons.
Marinière. Salsa Bercy (A) adicionada
de agua de mejillones reducida. Montada a la manteca. Especial para los
mejillones.
Pellaprat.
Para cuatro dl; preparar una salsa Bercy. Incorporar un dl de caldo de
mejillones. Reducir a la mitad y ligar con tres yemas de huevos. Esta salsa es
especialmente apropiada para los mejillones.
Normande. Velouté al fumet de lenguado, esencia de champignons y jugo de ostras.
Ligado con yemas y crema. Reducir y ponerla a punto, con manteca, crema y un
jugo de limón.
Bocuse. Utilizar ½ l de velouté al “fumet” de pescado;
agregarle 2 dl de jugo de cocción de champiñones, y ½ vaso de cocción de ostras
(el líquido de las ostras que ha sido utilizado para escalfarlas). Reducir a
las 2/3 partes del volumen, y luego, ligar con 4 yemas de huevo, batidas con 3
cucharadas de crema de leche fr4esca. Pasar por una muselina (estameña fina) y
volver a poner sobre el fuego; remover constantemente hasta que empiece la
ebullición; apartar la brasera del fuego e incorporar, batiendo enérgicamente,
125 g de mantequilla fresca.
Pellaprat. Para medio litro: medio l fumet de pescado; 80 g
de mantequilla; 25 g harina; un dl y medio de crema; un dl caldo de ostras;
cinco cl caldo de champiñones; dos yemas huevo. Cocción: 30 minutos.
Hacer un rubio dorado
con 35 g de mantequilla y 25 g de harina. Mojarlo con fumet de pescado,
añadiendo el caldo de las ostras y los champiñones. Reducir en un tercio, ligar
con dos yemas y la crema. Colar y agregarle mantequilla. La salsa debe quedar
cremosa. Es especial para el lenguado a la normanda.
Persil para pescados. (Parsley sauce for fish.)
(Inglesa.) Velouté
de pescado a la infusión de hojas de perejil. Concluirla de igual forma que la
anterior. Jugo de limón.
Poulette. Salsa Alemana con reducción de vino blanco, fumet de champignons,
escaluñas. Ponerla a punto con crema de leche y manteca. Perejil picado.
Pellaprat. Medio litro
salsa velouté; un dl caldo champiñones; un dl crema; tres yemas huevo.
Mezclar el caldo de los champiñones a la salsa
velouté. Ligarlo todo con las yemas de huevo y la crema, y completar con el
perejil picado y el zumo de limón.
Ravigote (caliente). Reducir ½ vino blanco, ½ vinagre. Añadir velouté
ordinaria. Ponerla a punto con manteca de escaluñas. Cebollina, estragón y
perifollo picado.
Pellaprat. Para un
litro y cuarto: un litro salsa velouté; dos dl vino blanco; un dl vinagre; 100
gr mantequilla de escalonia; 20 gr perifollo; estragón y cebollino picados.
Reducir a la mitad el
vino y vinagre. Añadir el velouté. Dejarlo hervir. Incorporarle la mantequilla
de escalonias y las hierbas.
Riche. Salsa Diplomate adicionada de trufas bien negras, cortadas en dados.
Toulouse. Salsa Alemana adicionada de crema. Reducir. Ponerla a punto con esencia de
trufa, manteca y jugo de limón.
Véron. ¾ de salsa Normanda, ¼ de Tyrolienne. Mezclar. Concluirla con glace de
viande diluida y esencia de anchoas. Para pescados.
Villageoise. Velouté
ordinaria adicionada de Soubise a la Bechamel y alargada con jugo de ternera y
fumet de champignons. Ligar con yemas y crema. Manteca.
Villeroy (A). Salsa
Alemana reducida, adicionada de trufas y jamón picado muy fino.
2.1.3. Salsa Bechamel.
La diferencia con la
anterior viene marcada por el líquido utilizado, que en este caso es leche.
Su color es muy blanco
y su espesor vendrá marcado por su posterior utilización.
Utilizaremos 1 l de
leche, 60-80-130 de harina, 60-80-130 de mantequilla, sal, pimienta y nuez
moscada.
Elaboración de un roux
blanco y enfriado. Añadir la leche caliente al roux frío y remover. Sazonar.
Cocer unos 15 minutos
y colar si fuera necesario.
Reservar en recipiente
de material inalterable con mantequilla derretida por encima. Es mejor
realizarla para su utilización inmediata.
Debe resultar de color
completamente blanco y de espesor correcto para utilización posterior. La
mantequilla deberá ser de buena calidad y el sabor de las especias el justo.
Se utiliza para la
confección de salsa derivadas y para napar y gratinar platos.
Bocuse. Salsa bechamel. Preparar un roux dorado y bañarlo a razón de un l de leche
por cada 125 g de roux. Hacer hervir, procurando remover constantemente con el
fin de obtener una salsa perfectamente homogénea, y verterla sobre una brasera
en la que previamente se habrán dispuesto 60 g de carne de ternera bien blanca
y magra cortada a dados y rehogada en mantequilla, junto con una zanahoria de
tamaño mediano cortada en finas laminillas, una ramita de tomillo, una pizca de
pimienta recién molida, una raspadura de nuez moscada y una pulgarada de sal.
Cocer a fuego suave
por espacio de una hora; echar la salsa sobre una estameña sin desprender las
partes que se adhieren a la brasera que, por lo general, toman una ligera
coloración durante la cocción, y recogerla en un cuenco.
Poner en la superficie unos trozos de mantequilla,
para evitar la formación de película y, más adelante, de grumos.
Esta salsa puede
hacerse igualmente sustituyendo la ternera por pescado blanco.
Finalmente por razones
de economía o de tiempo, se puede prescindir de la carne de ternera; en tal
caso, el sabor de la salsa quedará disminuido.
Pellaprat. Bechamel. Para un litro. 70 gr mantequilla; 60 gr harina; un litro de
leche. Cocción 15 minutos. Con la mantequilla y harina hacer un rubio. Dejar
cocer unos instantes, sin que tome color, y mojarlo con la leche. Remover hasta
que hierva, sazonar con sal y pimienta. Dejar cocer lentamente para evitar que
se queme. Colarlo.
Escoffier. Proporciones para un litro: Preparar un rubio claro como el que ya hemos
indicado, desleírlo en un litro de leche hirviendo y dejar que rompa a hervir,
moviendo constantemente con una espátula o un batidor. Retirar la cacerola a un
lado del fuego, añadir una pulgarada de pimienta molida, una pizca de nuez
moscada rallada, un clavo de especia insertado en una cebolla de tamaña
mediano, y un ramillete pequeño compuesto de tallos de perejil, media hoja de
laurel y una ramita de tomillo. Dejar cocer a fuego lento durante una media
hora, teniendo la precaución de levantar la cacerola por un lado, para que no
descanse todo el fondo sobre el fuego.
Pasar la salsa por un
colador fino y ponerla en reserva en una terrina, cubriendo la superficie con
mantequilla, para evitar el que se forme nata. Por lo general la salsa bechamel
no se prepara con anticipación.
Práctico. Béchamel. Roux blanco a la manteca, mojado con leche caliente hervida,
cebolla clavada de clavos de olor, sal, cayena, nuez moscadas, hojas de laurel.
25 minutos de cocción. Pasar.
Salsas
derivadas de la Bechamel.
-Salsa Crema. Es
una salsa bechamel a la que se añade nata líquida. Se termina con un poco de
nata y zumo de limón. Para pescados, huevos, aves y hortalizas.
Bocuse. Mezclar en una
brasera un l de salsa bechamel y 2 dl de crema de leche fresca; hacer hervir y
luego reducir a fuego vivo, removiendo continuamente con la espátula, hasta que
queden ¾ de l de salsa aproximadamente.
Pasar por la estameña
fina (un trozo de muselina): dar un nuevo hervor y, seguidamente, incorporar,
con la brasera apartada del fuego, ½ vaso de crema de leche fresca, 50 g de
mantequilla y unas gotas de limón. Conservar al calor, al baño María. No deberá
hervir más.
Pellaprat. Para un
litro: un litro de bechamel; tres dl de crema.
Añadir con la espátula
dos dl de crema a la bechamel y reducirla en una cuarta parte. Pasarla por el
tamiz e incorporar el resto de la crema.
Práctico. Crème. Salsa
Bechamel con mucha crema de leche.
-Salsa Mornay. Añadir
a la salsa bechamel sacada del fuego, queso rallado (gruyere o parmesano) y
yemas. Se le puede añadir un poco de nata, y no será necesario ligar con yemas.
Para los huevos, hortalizas, pastas, pescados y mariscos.
Bocuse. Hacer hervir ½
l de salsa bechamel, incorporándole 50 g de queso de Gruyère, y dejar hervir,
removiendo constantemente hasta que el queso se haya derretido por completo.
Con la brasera apartada del fuego, ligar la salsa con 2 yemas de huevo batidas
en un bol con una cucharada de crema de leche fresca o, en su defecto, de
leche. Calentarla suavemente, batiéndola enérgicamente hasta que esté a punto de
volver a hervir.
Con la brasera
apartada del fuego, agregar finalmente 2 ó 3 cucharadas de crema de leche
fresca y una cucharada de mantequilla fresca.
Esta salsa debe ser
tan consistente como para cubrir totalmente los alimentos que acompaña. Aun
cuando de apariencia espesa, debe ser cremosa.
Cuando sirve de
acompañamiento a un pescado, conviene agregarle un fondo reducido del pescado,
aderezado a la Mornay.
Pellaprat. Un litro de
bechamel; tres yemas de huevo; dos dl crema; 50 gr de gruyère o parmesano rallado.
Desleír las yemas de
huevo en la crema. Añadir a la bechamel caliente, cocerla algunos minutos,
retirar del fuego y añadir el queso.
Escoffier. Preparar
medio litro de salsa Bechamel, a la cual se agregarán en el momento de servir,
100 gr de mantequilla fina y 3 cucharadas de queso parmesano rallado.
Práctico. Salsa
Béchamel adicionada de queso rallado. Poner a punto con crema de leche y
manteca. Si es destinada a los pescados adicionarla de la cocción de los mismos
reducida. Es facultativo ligarla con yemas.
-Salsa Cardinal.
Añadir a la bechamel
fumet de pescado y esencia de trufas, añadir nata líquida y cocer hasta la
densidad deseada. Fuera del fuego añadir la mantequilla de bogavante o de
cangrejos y sazonar con cayena.
Bocuse. Preparar ½ l de
salsa bechamel e incorporarle un vaso de crema de leche fresca; reducir
rápidamente removiendo con una espátula, hasta que la mezcla adquiera la
consistencia deseada. Con la brasera apartada de la lumbre, agregar finalmente 50 g de
mantequilla de bogavante. Batir enérgicamente y comprobar el sazonamiento. Será
más fuerte que la salsa Nantua al agregarle un vaso de “fumet” de pescado
reducido previamente a una cucharada. También se le puede añadir una cucharada
de jugo de trufas cuando éstas forman parte de la guarnición.
Pellaprat. Cardenal.
Para un litro y cuarto: un litro de bechamel; dos dl fumet de pescado; dos dl
crema; 100 gr de mantequilla de bogavante o cangrejos.
Reducir a la mitad el
fumet de pescado, incorporarlo a la bechamel con la crema. Darle algunos
hervores. Montar con la mantequilla y sazonar con cayena.
Escoffier. Es una
bechamel a la crema, a la cual se agregan por cada medio litro de salsa, de 75
a 100 gr de mantequilla de langosta, avivando la salsa con una pizca de
pimienta de Cayena. Dicha mantequilla de langosta se obtendrá machacando
pedacitos de langosta con cierta cantidad de mantequilla.
Práctico. Cardinal.
Salsa bechamel al fumet de pescado y trufas, adicionada de crema. Ponerla a
punto fuera del fuego con manteca de langosta color rosa. Punta de cayena.
-Salsa Soubise.
Escaldar la cebolla
cortada muy fina, escurrir y saltear con mantequilla. Añadir la bechamel,
sazonar con sal y pimienta. Pasar por el tamiz. Calentar y montar con
mantequilla o nata. Para hortalizas, pescados y carnes blancas.
Bocuse. Cortar en
finas rodajas 200g de cebolla; escaldarlas y enfriarlas con agua, escurrirlas
con todo cuidado y ponerlas a rehogar durante
20 minutos en una sartén con 30 g de mantequilla. La cebolla no deberá
tomar color. Echar ½ l de salsa bechamel. Poner a cocer a fuego suave y con la
brasera tapada durante 20 minutos; pasar la preparación por la estameña,
ejerciendo una fuerte presión sobre la cebolla. Dar un nuevo hervor y con la
brasera apartada del fuego, incorporar finalmente 2 cucharadas de crema de
leche fresca y 50 g de mantequilla.
Para una salsa Soubise
con tomate le incorporaremos puré de éste, reducido a razón de una parte de
puré de tomate pos dos parte de salsa.
Pellaprat. Medio litro
de bechamel; 300 gr cebolla; 100 gr mantequilla o un dl de crema.
Escaldar las cebollas
cortadas muy finas, escurrirlas y saltearlas con mantequilla. Añadir la
bechamel, sazonar con sal y pimienta. Pasar por el tamiz. Calentar de nuevo y
montar con la mantequilla o la crema.
Escoffier. Salsa o
puré Soubise. Cortar en rodajas 500 gr de cebollas y cocerlas durante 5 ó 6
minutos en agua hirviendo. Escurrirlas y ponerlas en una cacerola bien untada
con mantequilla. Añadir 150 gr de arroz, dos tercios de litro de caldo blanco,
una pulgarada de sal, una pizca de pimienta blanca y una buena pulgarada de
azúcar. Hacer que rompa el hervor, tapar la cacerola y dejar cocer lentamente
en el horno.
Seguidamente, majar el
arroz y las cebollas en el mortero y pasar el puré por tamiz fino. A continuación
calentarlo bien y agregar dos cucharadas de mantequilla fina y un dl de crema
fresca.
Práctico. Soubise. (A)
Cebolla estofada a la manteca a blanco. Añadir: Bechamel y un poco de crema.
Cocer y pasar.
(B). Cebolla y arroz
blanqueados. Cocer con caldo blanco. Sazonar y cocer 30 minutos. Machacar al
mortero y pasar. Ponerla a punto con crema.
La salsa Soubise debe
ser bien blanca y algo espesa. Es preferible emplear Bechamel y no arroz.
Bâtarde. Bechamel ligada con yemas;
jugo de limón. Montada con manteca fuera del fuego. Pasar a la estameña.
Beurre à l´Anglaise. (Butter sauce.)(Inglesa.) Salsa Bâtarde sin
estar ligada.
Écossaise. (Scotch egg sacue.)(Inglesa). Salsa
bechamel liviana. Guarnición de blanco de huevo duro cortado, y las yemas
pasadas al cedazo de tejido mediano.
Groseille. Grosella verde blanqueada y concluida de cocer con vino blanco y un poco
de azúcar. Pasar a la estameña y mezclar este puré con una salsa Bâtarde.
Homard. (B)(Lobster sauce)(Inglesa). Salsa
bechamel a la esencia de anchoa. Guarnición: dados de homard, punta de cayena.
Moutarde. Salsa Bâtarde adicionada de
mostaza inglesa.
Nantua. Machacar al mortero cabezas
de cangrejos de río, o de langostinos. Rehogar a la manteca un poco de cebolla
y escaluñas. Agregar dos tomates frescos o un poco de puré de tomate. Añadir
las cabezas, hoja de laurel, punta de cayena, sal, vaso de coñac y vino blanco.
Reducir y mojar con fumet de pescado. Bechamel y crema de leche. Cocer a punto.
Pasar por la estameña. Guarnición: colas de cangrejos.
Bocuse. Preparar ½ l
de salsa bechamel e incorporarle un vaso de crema de leche fresca; reducir
rápidamente removiendo con una espátula, hasta que la mezcla adquiera la
consistencia deseada. Con la brasera apartada de la lumbre, agregar finalmente
50 g de mantequilla de cangrejos de río. Batir enérgicamente y comprobar el
sazonamiento.
Pellaprat. Un litro
bechamel; dos dl crema; 150 gr mantequilla de cangrejos; 100 gr cangrejos sin
caparazón.
Añadir la crema a la
bechamel y reducir en un cuarto. Agregarle la mantequilla y las colas de
cangrejos fuera del fuego. Sazonar con cayena.
Oeufs à l´Anglaise. (egg sauce)(inglesa). Salsa bechamel. Guarnición de dados de huevos
duros, punta de moscada. Para el Haddock y Bacalao.
Princière. Salsa Nantua, adicionada de
colas de langostinos y juliana de trufa.
2.1.4.
Salsa de tomate.
En la cocina existe
gran variedad de elaboraciones de salsa de tomate. Aquí hacemos hincapié en la
denominada Española y en el apartado de variaciones explicaremos los
ingredientes de la salsa de tomate francesa.
Ingredientes y fases:
tomates 1kg, cebolla 250g, ajos 2 dientes, pimentón ½ c, harina 20g, aceite 1
dl, laurel 1hoja, sal y azúcar.
Rehogar en el aceite
la cebolla y los ajos. Añadir la harina y el pimentón y rehogar. Añadir el
tomate pelado y sin pepitas, el laurel y sazonar. Dejar cocer una hora y pasar.
Debe resultar de color
rojo. La utilización del pimentón es para realzar el color; si los tomates son
lo suficientemente maduros no hará falta.
Se aplica tal cual
como acompañamiento de algunos platos, para salsas derivadas y para la
confección de ciertos platos de arroz y pasta.
Como principal
alternativa tenemos la salsa de tomate francesa que se diferencia de la nuestra
en la adición de puerros, zanahoria y tocino y se aromatiza con un bouquet
garni.
Bocuse. Salsa de tomate. Para un l de salsa. Escoger 1,5k de tomates bien maduros.
Preparar una “mirepoix” compuesta por 50 g de tocino de pecho, una zanahoria de
tamaño mediano, una cebolla de tamaño mediano, cortados a daditos, una ramita
de tomillo, un trocito de hoja de laurel, una cucharadita de mantequilla, todo
ello fundido, rehogado, luego dorado muy ligeramente en la misma brasera en la
que se hará la salsa. Cuando la “mirepoix” haya quedado dorada en su punto,
espolvorearla con una cucharada de harina; mezclar y cocer a fuego suave como
si de un roux dorado se tratase. Incorporar los tomates, desprovistos de su
agua de vegetación y de las pepitas, 4 dientes de ajo, una pulgarada de sal,
una pizca de pimienta, ¼ de l de fondo blanco y, finalmente, 2 terrones de
azúcar derretidos, cocidos a punto de
caramelo dorado y desglasados con una cucharadita de vinagre de vino.
Poner a hervir
removiendo, cocer con la cacerola tapada a fuego suave (en el horno a ser
posible) por espacio de una hora y media como mínimo.
Pasar por la estameña;
hacer hervir nuevamente para eliminar los fermentos que se producen a
consecuencia del paso por la estameña, y recoger en un cuenco. Conservar para
una ulterior utilización. Poner siempre unos trozos de mantequilla fresca en la
superficie, con el fin de evitar la formación de película.
Pellaprat. Salsa tomate. Para un litro:
medio litro de puré de tomate o un cuarto de litro de tomate concentrado; 50 g
de tocino; 50 g de zanahoria; una cebolla; la parte blanca de un puerro; un
trozo de apio; una brizna de tomillo; una hoja de laurel; dos dientes de ajo;
25 g harina; dos terrones de azúcar. Cocción: una hora y media.
Rehogar en aceite el
tocino y los elementos aromáticos. Añadir 25 g de harina. Cocer cinco minutos a
fuego lento, removiendo con la espátula. Añadir la harina, tres cuartos de
litro de agua o fondo oscuro, sal, pimienta, nuez moscada raspada y dos
terrones de azúcar. Cocer lentamente una hora y media, de preferencia al horno.
Colar la salsa, rectificar el sazonamiento y terminar añadiéndole un poco de
mantequilla.
Salsa de tomates
frescos. Para un litro y cuarto:
una cebolla y una zanahoria cortadas muy finas; una pizca de perejil; tomillo y
laurel; 25 g de harina; un k de tomates muy maduros; sal; pimienta; tres
terrones de azúcar; 30 g mantequilla. Cocción: 45 minutos.
Dorar con mantequilla
la cebolla y la zanahoria. Añadirle perejil, tomillo y laurel, luego un minuto
después la cucharada de harina. Añadir mezclándolo bien, los tomates picados,
peso sin mondar. Sazonar y añadir el azúcar. Cocer, de preferencia al horno,
durante 45 minutos removiendo dos o tres veces para que no se agarre el tomate.
Pasar por un tamiz muy fino. Según el empleo de la salsa, se aclara o no.
Ponerle mantequilla.
De tomates frescos
a la italiana. Para un litro. 500
g de tomates frescos; 100 g de cebolla; 50 g de zanahoria; 50 g de tocino magro
ahumado; ramillete; 20 g de mantequilla; 25 g de harina; tres cuartos de litro
consomé o caldo. Cocción: una hora y media.
Rehogar con
mantequilla, las zanahorias, las cebollas y el tocino cortado en dados grandes.
Espolvorear con harina y hacerlo dorar. Añadir los tomates. Mezclarlo bien.
Cubrir de agua o caldo. Sazonar y añadir el ramillete. Cocer lentamente al
horno durante una hora. Pasar por el chino. Rectificar y terminar con un poco
de mantequilla. Esta salsa queda aún mejor si se brasean los tomates al horno,
hasta la completa evaporación del agua.
Escoffier. Proporciones para un litro: para hacer una buena salsa de tomate conviene
disponer de 3 kilos de tomates maduros y frescos, dividirlos por la mitad,
quitarles las pepitas, cortarlos a pedazos y ponerlos en una cazuela con 75 g
de mantequilla o mejor con cinco cucharadas de aceite de oliva, 10 g de sal,
una pulgarada de pimienta molida y un diente de ajo atado dentro de un ramito
de perejil. Tapar la cazuela y dejar que los tomates cuezan durante unos 30 ó
35 minutos a fuego lento. Tamizar la salsa y guardarla en una terrina
poniéndole una capa de mantequilla, para que no forme costra.
Este sistema de
prepara la salsa de tomate tiene la ventaja de su rapidez, logrando al mismo
tiempo que conserve totalmente la frescura y el perfume del fruto.
A falta de tomates
frescos, los de conserva también se pueden utilizar con muy buen resultado,
siendo éstos más fáciles de adquirir sea cual sea la época del año.
Práctico. Marcar un fondo con una cebolla, un diente de ajo, una zanahoria, unos
recortes de jamón crudo y un poco de harina, dejar dorar un poco, agregar
tomates frescos cortados o pasta de tomate. Brasear todo junto unos minutos y
mojar con fondo blanco. Tomillo, laurel, sal, pimienta y algo de azúcar.
Cocinar y pasar al chino.
Italiana. Salsa de tomate con un duxelle de champiñon,
cebolla y jamón, mojada con vino y con un poco de salsa española.
Bocuse. Ingredientes:
½ vaso de vino blanco seco; una cucharadita de escalonia picada; 2 dl de
semiglaseado o de salsa española; una cucharada de puré de tomate reducido; 40
g de jamón magro cortado a daditos; 100 g de champiñones bien blancos; unos
tallos de perejil; ¼ de limón; 60 g de mantequilla.
Método: Poner a
calentar a fuego vivo una cucharadita de mantequilla en una sartén; echar en
ella los champiñones picados muy menudos; hacerles tomar algo de color y
agregar seguidamente la escalonia y el vino blanco; reducir el líquido a 2
cucharadas. Echar el puré de tomate o 3 tomates muy maduros sin piel ni
pepitas, sin agua de vegetación y picados. Reducir nuevamente y completar con
el semiglaseado y el jamón.
Dejar hervir a fuego
suave durante 10 minutos; apartar la brasera del fuego, echar en ella la
mantequilla y exprimir en la salsa el
zumo del ¼ de limón; comprobar el sazonamiento y darle el último toque
espolvoreando con una pulgarada de perejil picado.
Según el gusto o su
ulterior utilización, se puede incorporar una pulgarada de estragón picado.
Pellaprat. Para un
cuarto litro: 60 gr champiñones; 50 gr jamón de París; una escalonia; un dl
vino blanco; una cucharada salsa tomate; una cucharada aceite; dos dl
media-glasa. Cocción: 15 minutos.
Dorar con el aceite
los champiñones crudos cortados finos. Cuando estén un poco dorados, añadir el
jamón cocido muy magro, cortado en dados pequeñitos y la escalonia picada.
Dejar cocer durante dos minutos. Mojar con el vino blanco. Reducir a la mitad,
añadir entonces la media glasa, la salsa tomate y un poco de perejil picados.
Sazonar y dejar cocer cinco o seis minutos. Para pequeñas entradas.
Escoffier. (Salsa
italiana de champiñones (Duxelles)). A tres cuartos de litro de una salsa
media-glasa atomatada añadirle 4 cucharadas de champiñones y 125 g de jamón
magro cortado en trocitos muy finos. Dejar hervir durante 5 ó 6 minutos.
Completar con una pulgarada de perejil picado.
Niçoise. ½ salsa de tomate y ½ tomate
concassée, adicionado de un poco de ajo picado, rehogado a la manteca.
Portugaise (A). Cebolla
y pimientos verdes cortados en juliana, rehogados al aceite. Añadir: un poco de
ajo, bouquet, un pequeño hueso de jamón crudo y tomates sin piel ni semilla,
cortados de igual forma. Alargarla con un poco de salsa de tomate clara.
Bocuse. Cortar en
finas rodajas una cebolla gorda; hacerle tomar algo de color a fuego muy suave
y en dos cucharadas de aceite; seguidamente, agregar 800 g de tomates bien
maduros, pelados, desprovistos de pepitas y de agua de vegetación, y troceados
toscamente. Luego, 3 dientes de ajo majados, una pulgarada de sal, una pizca de
pimienta y otra de azúcar, un ramillete de perejil, provisto de una ramita de
tomillo y un trocito de hoja de laurel.
Dejar cocer a fuego
suave por espacio de media hora.
Comprobar el
sazonamiento y echar en la cacerola, apartada del fuego, mantequilla, siempre y
cuando no se vaya a utilizar la salsa como elemento de desglaseado del plato
acompañante.
Provenzal. Salsa de tomate con ajo perejil y laurel. Se llama también “fondue de
tomate”.
Pellaprat. Parta tres
cuartos litro: 15 tomates sin pepitas y desmenuzados; dos dl aceite de oliva;
dos dientes de ajo machacados; una cucharada de perejil picado. Cocción 20
minutos.
Saltear los tomates
con el aceite hirviendo. Sazonar con sal y pimienta, añadir los dientes de ajo.
Tapar y dejar cocer 20 minutos. “fondue de tomate”.
2.2 Salsas básicas emulsionadas.
Son las salsas que no utilizan para
espesar una ligazón de harina sino que ligan por la emulsión de la grasa,
aceite, mantequilla, yema de huevo.
La realización de lasa salsas
emulsionadas templadas responden principalmente a las propiedades
físico-químicas de los huevos:
-
Por la
propiedad de las proteínas de los huevos de aumentar su volumen por la acción
de un batido intenso con la incorporación de aire.
-
Propiedad de
las proteínas de los huevos de coagularse bajo la acción del calor y de los
ácidos (zumo de limón, vino blanco, vinagre, etc.)
-
La propiedad
de la Lecitina (grasa), contenida en la yema, de estabilizar la emulsión
agua-grasa.
Las salsas
emulsionadas a base de huevos tienen un gran riesgo de contaminación microbiana
por lo que se deben tener ciertos cuidados.
-
Material de
elaboración perfectamente limpio.
-
No utilizar
nunca plata por el fenómeno de oxidación.
-
Sólo utilizar
huevos muy frescos.
-
Realizar la
salsa necesaria para el servicio.
-
No
reutilizar, ni mezclar un anterior con una nueva.
2.2.1. Salsa Mahonesa.(Salsa fría).
En torno a esta salsa
existe una gran polémica, españoles y franceses se disputan su procedencia.
Polémica que continua en nuestros días.
Salsa de color
amarillento que se consigue por la emulsión, en frío, del aceite y la yema de
huevo.
Ingredientes: aceite 1
litro (de semillas u oliva de bajísima graduación), 4 yemas de huevo, sal, zumo
de limón o vinagre.
Batir las yemas en un
recipiente de material inalterable. Añadir el aceite a chorro fino sin dejar de
batir. Sazonar con la sal disuelta en el zumo de limón.
Los resultados vendrán
marcados por la calidad del aceite y de los huevos. Debe resultar espesa y de
un bonito color amarillento.
Se utiliza como
acompañamiento de platos fríos, ensaladillas, huevos duros, pescados, etc. Para
confeccionar salsas derivadas.
La podremos elaborar
con batidora, para lo cual se utilizarán huevos enteros. Hoy en día y por los
problemas de la salmonela, se elabora la “lactonesa”, especie de mahonesa en la
que se sustituye el huevo por la misma cantidad de leche entera.
Actualmente está
prohibido elaborar mahonesa con huevos frescos en los lugares públicos. Si se
hiciese, utilizaremos huevina, huevo liofilizado, etc.
Bocuse. Salsa mayonesa o mahonesa. Salsa base por excelencia de innumerables
combinaciones de salsa frías. Su concepción es simple y sumamente remota. Los
bibliófilos culinarios han hallado para ella orígenes fidedignos en los
escritos de Apicius, lo cual no significa que no tenga una ascendencia aún más
lejana. Resulta de elaboración fácil si se atiene uno a determinadas
condiciones.
Al ser originaria de
regiones soleadas, esta salsa teme el frío; al entrar en su composición un
elemento principal fluido por excelencia y, por añadidura, inerte, requiere un
batido enérgico para resultar sabrosa y ligera; por su propia naturaleza sería
indigesta si no se le agregase una materia ácida: vinagre o limón.
Se deberá, pues,
templar el recipiente y el aceite a utilizar y respetar cuidadosamente el
sistema de elaboración que damos a continuación.
Ingredientes: 6 yemas
de huevo; un l de aceite entibiado; 10 g de sal fina; una buena pulgarada de
pimienta blanca recién molida; una cucharada y media de vinagre de vino o el
zumo de un limón pequeño.
Método: echar las
yemas de huevo (desprovistas de la galladura), la sal, la pimienta, el vinagre
o el zumo de limón en un cuenco; mezclar todos estos elementos, utilizando para
ello un batidor, con el fin de dar algo de consistencia (de cuerpo) a las
yemas; luego, ir vertiendo el aceite gota a gota, e iniciar la preparación
batiendo enérgicamente. Si la masa se torna demasiado consistente, diluirla con
una cucharadita de vinagre o de agua en
caso de que la salsa ya esté suficientemente acidulada. Proseguir la operación
a un ritmo creciente a medida que la salsa va aumentando de volumen.
El punto que reviste
mayor importancia es que, durante todo el tiempo de elaboración, la salsa
conserve una consistencia cremosa igual, con el fin de que absorba oxígeno y,
por ende, alcance un máximo grado de ligereza y de untuosidad.
Al igual que en la
salsa holandesa, el aceite, cuerpo graso y fluido, se incorpora a las yemas de
huevo que hacen las veces de ligazón y de base, siempre y cuando dicha
asociación sea efectuada lentamente y con un
batido enérgico que incrementa la temperatura de la masa la airee.
No vacilo en aconsejar
que sustituya la cucharada de madera o la espátula por un batidor de tipo
casero, cuando se trata de elaborar una salsa mayonesa. En tal caso, la
operación, para alcanzar pleno éxito, deberá ser mucho más lenta, pero el logro
– en cuanto a sabor y aspecto – será tanto mayor.
Una vez terminada la
preparación, se la puede hacer más resistente al deterioro incorporándole una
cucharadita de vinagre de vino hirviendo.
Agreguemos que una
salsa mayonesa que se ha cortado puede ser salvada fácilmente, a pesar de los
errores cometidos: recipiente o aceite demasiado fríos, o bien precipitación en
el curso de la elaboración, o ambas cosas a la vez.
Para ello, echar una
cucharada de agua tibia en un cuenco e ir batiéndola enérgicamente a medida que
se va echado en ella, poco a poco, la salsa en cuestión.
Pellaprat. Seis o siete personas. Tres o cuatro yemas de huevo; medio litro de aceite
de oliva; sal; pimienta, una cucharadita de vinagre.
Poner las yemas de
huevo en un tazón, y añadir sal, pimienta blanca y vinagre. Con un batidor
pequeño, batir rápidamente y con vigor la salsa agregando poco a poco el aceite
que se deja caer como un hilillo muy fino que irá aumentando paulatinamente de
volumen, pero sin dejar de batir, y sin importar en qué sentido. La única
precaución que hay que tomar es que el aceite esté ligeramente templado, pues
el frío es el peor enemigo de la mayonesa. Cuando la salsa esté terminada, se
rectifica el sazonamiento y la consistencia con agua tibia. Se puede
condimentar la mayonesa con mostaza, reemplazar el vinagre por limón e
incorporar hierbas aromáticas, etc. La mayonesa es una salsa básica: se sazona
también con puré de crustáceos, de anchoas, etc.
Escoffier. La mayoría de las salsas frías compuestas derivan de la mayonesa, y por
esta razón se la considera como salsa madre, lo mismo que la Española y la
Velouté.
La preparación de la
Mayonesa es muy sencilla, pero sin embargo es necesario tener en cuenta ciertos
pequeños detalles que pasamos a detallar:
Proporciones de la
Salsa Mayonesa: 3 ó 4 yemas de huevo a las que se habrá retirado la galladura
con mucho cuidado, medio litro de aceite, 6 gramos de sal fina, una pulgarada
de pimienta blanca, una cucharadita de vinagre o de limón. A gusto, se puede
añadir al vinagre dos cucharaditas de mostaza de Dijon.
1º. Poner las yemas de
huevo en una terrina cuyo fondo sea cóncavo, o mejor un mortero, añadiendo la
sal, pimienta y un hilo de vinagre o limón.
2º. Majar las yemas
incorporando el aceite gota a gota al principio, pero en cuanto la salsa
empiece a ligarse se debe dejar caer en hilo, echándole de vez en cuando unas
gotas de vinagre o limón.
3º. Si la salsa no
debe utilizarse enseguida, añadirle dos cucharadas de agua hirviendo a fin de
asegurar su ligazón y evitar que se desintegre después de unas horas.
Nota. 1º. Existe el
prejuicio de que con el sazonado de las yemas se provoca la desintegración de
la salsa, lo cual es totalmente equivocado. Al contrario, se ha demostrado
prácticamente que la sal, una vez licuada, aumenta la fuerza asimiladora de las
yemas de huevo.
2º. También es un
error la creencia de que la Mayonesa debe prepararse sobre hielo, toda vez que
el frío es la causa más frecuente de su desintegración. El aceite debe
mantenerse siempre a la temperatura ambiente.
3º. La desintegración
de la mayonesa proviene: por incorporar demasiado aceite al comenzar su
confección, por utilizar un aceite demasiado frío y por incorporarle excesivo
aceite con relación al número de yemas.
Práctico. Mayonnaise. Salsa de base para preparaciones de muchas salsas frías. Poner dentro
de una terrina u otro utensilio adecuado 10 yemas crudas bien limpias de clara,
sal, pimienta y una cucharada en polvo, un poco de vinagre blanco o jugo de
limón. Mezclar bien con un batidor e incorporar 1 ½ litro de aceite en pequeñas
cantidades, batiendo la salsa, agregando algunas gotas de vinagre, para evitar
la descomposición de la misma, y por último, agregarle dos cucharadas de agua
hirviendo.
Chantillí.
Mahonesa con zumo de
limón a la que en el momento de su utilización se le añade nata montada.
Especial para espárragos.
Pellaprat. Cuatro
personas. Tres dl mayonesa; el zumo de un limón; cinco cl de crema de leche
batida.
Mezclar el zumo de
limón con la mayonesa y añadirle después la crema. Salsa especial para los
espárragos.
Escoffier. Se trata de
una sala Mayonesa a la cual, en el momento de servir, se le incorporan 2
cucharadas de crema batida, bien dura, por cada cuarto de litro de mayonesa.
Práctico. Salsa
Mayonesa espesa al jugo de limón, adicionada de crema batida al momento de
servir. Especial para espárragos fríos o tibios.
Remolada. Mahonesa a la que se añaden, pepinillos
picados, alcaparras, anchoas en puré, perejil y perifollo picados y muy bien
escurridos.
Para platos fríos,
pescados, huevos y hortalizas.
Bocuse. Salsa
“Rémoulade”. Echar en un l de salsa Mahonesa 2 cucharadas de alcaparras y 6
pepinillos de tamaño mediano picados, así como las siguiente hiervas finas:
perejil, perifollo, estragón, cebolleta y, según gusto, una cucharadita de puré
de anchoa.
Pellaprat. Remulada.
Seis personas. Medio litro mayonesa; 100 g pepinillos y alcaparras; 30 g
perejil y perifollo.
Mayonesa con mostaza.
Picar muy fino las alcaparras, pepinillos y hierbas aromáticas, y exprimirlas
dentro de un lienzo, para extraer el líquido que es lo que se incorpora a la
mayonesa.
Escoffier. A un cuarto
de litro de salsa Mayonesa agregarle 2 cucharaditas de mostaza francesa, una
cucharada de pepinillos y media cucharada de alcaparras, todo ello bien
machacado, una pulgarada de perejil, otro tanto de perifollo y estragón
picados, y media cucharada de pasta de anchoas.
Práctico. Rémoulade.
Mayonesa a la mostaza adicionada de alcaparras, pepinillos, perejil, perifollo,
estragón y gotas de esencia de anchoas.
Tártara. Mahonesa con cebolla,
pepinillo, huevo duro, alcaparras y perejil.
Para hortalizas,
huevos y pescados fríos.
Bocuse. Idéntica
composición que la salsa “rémoulade”, sustituyendo el puré de anchoa por 2
cucharadas de mostaza de Dijon.
Pellaprat. Preparar
una salsa remulada. Agregar dos yemas de huevos duros, mezclados con 20 g de
mostaza.
Escoffier. Pasar 4 ó 5
yemas de huevo duro por un tamiz fino, ponerlas en una terrina y trabajarlas
hasta que formen una pasta lisa. Sazonarlas con sal y pimienta recién molida,
incorporando poco a poco 3 ó 4 decilitros de aceite y una cucharadita de
vinagre. Terminar la salsa agregando una buena cucharada de cebolla picada muy
menudita, mezclada con dos cucharadas de mayonesa, que se pasará por un tamiz
fino.
Práctico. Tartare.
Mayonesa adicionada de huevo duro, cebollina y pepinillos, picado muy fino.
Rosa. Mahonesa a la que se le
añaden, ketchup, zumo de naranja, brandy, nata líquida, tabasco y pimienta.
Para ensaladas
compuestas a base de aguacate y marisco, cócteles de marisco, hortalizas,
huevos y pescados.
Andaluza. Mezclar la Mahonesa con
puré de tomate concentrado y daditos de pimiento rojo. Para pescados fríos o a
la parrilla, brochetas de pescado... etc.
Bocuse. Agregar a una
salsa Mayonesa la quinta parte de su volumen de puré de tomate muy reducido,
así como 2 pimientos morrones cortados en fina juliana.
Pellaprat. Cinco o
seis personas. Tres dl Mayonesa bien espesa; un dl puré de tomate; 50 g de
pimientos dulces.
Mezclar la mayonesa
con el puré de tomate y los pimientos cortados en pequeños dados.
Vincent. Extracto de clorofila
obtenido de la cocción a 70º C de perejil, perifollo, estragón, acedera,
espinaca. Escurrir pasar por un tamiz fino y añadírselo a la Mahonesa junto con
yema de huevos duros pasados por el tamiz.
Bocuse. Agregar a ½ l
de salsa verde una decena de hojas de acedera tierna picadas muy menudas y 3
yemas de huevo duro pasadas por el tamiz. Finalizar la preparación con una
cucharadita de perifollo y de estragón picados.
Pellaprat. Proceder
como para la salsa verde. Añadir al puré 30 g de hojas de acedera y dos yemas
de huevos duros pasados por el tamiz.
Práctico. ½ L salsa
Tártara, ½ l salsa Verde. Mezclar.
Mahonesa encolada. Es
una salsa Mahonesa mezclada con gelatina.
Para cubrir platos
fríos.
Pellaprat. Mezclar la
Mayonesa con gelatina derretida, en la proporción de medio litro de mayonesa,
por dos dl de gelatina fundida. Esta salsa se utiliza para napar a la rusa
legumbres, carnes, etc. Hay que prepararla en el momento de emplearla, pues
pierde consistencia rápidamente. La mayonesa encolada, sólo debe emplearse en
caso de necesidad absoluta, pues “suda” gotitas de aceite.
Práctico. Mayonnaise
Collée. Adicionar 3 dl de jalea fundida con 7 dl de Mayonesa. Sirve para ligar
ensaladas de legumbres y para napar varios preparados fríos.
Mayonnaise á la Russe.
Salsa Mayonesa al vinagre de estragón y raifort rallado, adicionada de igual
cantidad de jalea fundida. Colocar el utensilio sobre hielo y batir hasta que
empiece a tomar cuerpo. Para ligar ensaladas de legumbres destinadas a ser
moldeadas.
Con purés, sean de
langostinos, caza, legumbres, etc., adicionados a una cantidad relativa de
mayonesa a la rusa, se combinan y se obtiene una gran variedad de hors d´ouvre
y entradas frías.
Algérienne. (A). Mayonesa adicionada de una juliana de apio y colas
de langostinos. Para pescados.
(B). Machacar al
mortero cebolla, sal, mostaza y sesos de ternera blanqueados. Pasar al cedazo.
Montar este puré con aceite y un poco de vinagre, operando igual que una
Mayonesa. Añadir perejil y pimienta. Especial para cabeza y pies de ternera.
Americana. Mezclar
¾ partes de salsa Mayonesa y ¼ parte de tomate Ketchup. Adicionar de salsa
Perrins, jugo de limón y sal.
Ayoli. Machacar al mortero 10
dientes de ajo, y añadir 2 yemas crudas y una cocida, sal y jugo de limón, y
montarlo como una Mayonesa, incorporando aceite en pequeñas cantidades. Esta
operación se hace en el mismo mortero, dando un movimiento de rotación al
pilón.
Nota. En Cataluña el
Ayoli se hace sin yemas, ajo, aceite, gotas de agua y limón.
Génoise. Machacar al mortero
pistaches y almendras. Luego agregar: perejil, perifollo, estragón y cebollina.
Machacar de nuevo. Pasar al cedazo. Añadir yemas crudas, sal, pimienta y jugo
de limón. Montarla con aceite como una Mayonesa. Especial para los pescados
fríos.
Gloucester. Mayonesa
a la crema agria, adicionada de algunas gotas de salsa Perrins y de hinojo
picado. (inglesa).
Granadina o andaluza. Salsa
Mayonesa adicionada de puré de tomate fin y bien colorado. Guarnición: dados
pequeños de pimientos morrones.
Grecque. Salsa Americana adicionada
de una brunoise cocida compuesta de apio, cebolla, zanahorias y trufas.
Gribiche. Mayonesa montada con yemas duras y mostaza,
sal y pimienta. Guarnición: alcaparras, pepinillos, perifollo, estragón y
perejil picado. Agregar una juliana de blanco de huevo duro. Para pescados
fríos.
Mousquetaire. Salsa Mayonesa con escaluñas picadas finas, cocidas con vino blanco.
Añadir un poco de glace de viande líquida, cebollina picada y punta de cayena.
Mousseline. Mayonesa adicionada de crema montada.
Russe. Mayonesa adicionada de un
puré de caviar y de parte cremosa de homard o langosta, condimentada de mostaza
y de algunas gotas de salsa Perrins.
Suédoise. Puré de manzanas cocidas al
vino blanco. Mezclada con salsa Mayonesa. Añadir raifort rallado.
Verte. Mayonesa adicionada de un
puré de hierbas blanqueadas. Espinacas, berros, cebollina, perejil, perifollos,
estragón, pasadas por el cedazo. Mezclar.
2.2.2. Salsa Bearnesa.
Es una salsa
emulsionada, en templado, de yemas y mantequilla.
Ingredientes y
elaboración. Mantequilla 1 kg, yemas de 8 a 12, vinagre de estragón 3 dl,
chalota 4 unidades, estragón picado, sal y pimienta.
Clarificar la
mantequilla al baño María. Reducir el vinagre con la chalota hasta casi seco.
Añadir a esta reducción un poquito de agua fría
y añadir las yemas. Montar las yemas sin calor directo. Sazonar. Añadir
a chorro fino la mantequilla clarificada. Pasar la salsa por la estameña y
añadir el estragón picado. Mantener a una temperatura entre 40 y 50 º C.
Resultados. Debe
resultar de un color amarillo verdoso, consistente y con sabor a estragón.
Esta salsa se puede
cortar por varias razones. Soluciones:
-
Si la salsa
queda muy espesa por la excesiva coagulación de las yemas, diluir con un poco
de agua templada.
-
Si la
mantequilla estaba muy caliente y la salsa no espesa bien, añadir un poco de
agua fría y volver a montar.
-
Si la
temperatura es muy baja y la salsa se solidifica, volver a calentar y montar
con un poco de agua templada.
-
Si no
funciona ninguna de las anteriores volver a montar una o dos yemas y añadir
poco a poco la holandesa cortada.
Aplicaciones. Se
utiliza como acompañamiento de carnes y pescados a la parrilla y para la
elaboración de derivadas.
Se puede emplear la
mantequilla sin clarificar, el vinagre puede no ser de estragón y en el caso de
no disponer de estragón fresco se puede sustituir por perifollo o perejil.
Bocuse. Ingredientes (6 pax). 3 cucharadas de vinagre de vino blanco; 3 escalonias
de tamaño mediano; una ramita de estragón; una pulgarada de perifollo; 4 yemas
de huevo; 25º g de mantequilla de primera calidad; una pulgarada de sal; una
pizca de pimienta recién molida.
Método: poner a
calentar una cucharadita de mantequilla en una sartén pequeña; echar en ésta la
escalonia picada muy menuda; dejar rehogar a fuego suave durante 10 minutos;
agregar el vinagre, el estragón y el perifollo picados, así como la pimienta
recién molida. Reducir a 2 cucharaditas de preparación. Seguidamente, proceder
tal como viene indicado en la receta de la salsa holandesa, calentando las
yemas para que alcancen una mayor consistencia.
Una vez terminada la
salsa, pasarla por la estameña, agregar una pizca de estragón y de perifollo
picados muy menudos y mantenerla a calor moderado al baño María. La salsa
deberá quedar mucho más consistente que la holandesa; de ahí que el número de
yemas de huevo que se incluyen sea ligeramente mayor. Su consistencia debe ser
similar a la de la mostaza.
Al igual que en el
caso de la salsa holandesa, se la puede menguar incorporándole salsa de
mantequilla. Sin embargo, hay que tener presente que perderá parte de su
finura.
Pellaprat. Seis pax. Cuatro granos de pimienta; dos escalonias picadas; media
cucharada de estragón picado; cinco cl vinagre; tres yemas huevo; 25º g mantequilla;
una pizca de perifollo picado.
Reducir el vinagre con
la escalonia, el perifollo y el estragón; ponerle también algunos granos de
pimienta aplastados. Cuando el vinagre quede reducido al volumen de una
cucharada de café, pasar por el chino. Poner en
otra cacerola, al baño María, las yemas, la sal, y terminarla como la
salsa holandesa, añadiendo a última hora una cucharada de perifollo y estragón
picados muy finos. Se sirve con parrilladas, huevos, etc.
Escoffier. Para un cuarto de l de salsa: dejar reducir en dos tercios un dl de vino
blanco y un dl de vinagre de estragón a los que se habrán agregado 2
cucharadita de escalonias picadas, una pulgarada de hojas de estragón picadas,
una pizca de pimienta blanca, una pulgarada de sal y el tamaño de una nuez de
mantequilla. Retirar la cazuela del fuego, dejar enfriar la cocción durante
algunos minutos, agregar 3 yemas de huevo y montar la salsa a fuego suave con
250 g de mantequilla reblandecida, que se agregarán poco a poco, y utilizando
un batidor como se hace con las salsas mayonesa y holandesa.
La ligazón de la salsa
se produce por la cocción lenta y progresiva de las yemas de huevo, por lo que
es indispensable un fuego muy suave.
Una vez incorporada
toda la mantequilla, pasar la salsa por una muselina, comprobar la sazón,
avivar con una punta de pimienta de Cayena y completar la salsa con una
pulgarada de estragón y una pizca de perifollo picado.
Esta salsa no requiere
que sea servida muy caliente.
Práctico. 1 kilo de manteca, 16 yemas, ¼ l de vinagre de estragón, un poco de
escaluñas picadas, pimienta blanca aplastada y troncos de estragón. Reducir el
vinagre con las escaluñas un poco revenidas a la manteca, la pimienta y los
troncos de estragón. Retirar del fuego. Agregar las yemas con un poco de agua
(poca) y trabajar con batidor en pomada en baño de María o sobre la plancha a
temperatura moderada. Luego montar fuera del fuego agregando en chorro fino la
manteca fundida de antemano y tibia. Pasar. Sazonar. Adicionar de estragón y
perifollo picado.
Nota. Es inútil querer
servir la salsa Béarnaise bien caliente; es suficiente servirla tibia, de lo
contrario se corta. En tal caso, remontarla agregando un jugo de limón y unas
gotas de agua.
Salsa Choron. Bearnesa
a la que se le añade puré de tomate concentrado.
Bocuse. Preparar salsa
bearnesa e incorporarle la cuarta parte de su volumen de puré de tomate muy
concentrado.
Pellaprat. Mismas
proporciones que ara la salsa bearnesa. Se añade además dos cucharadas de puré
de tomate espeso.
Escoffier. Preparar la
salsa bearnesa como indicamos más arriba, peros sin la adición final del
estragón y perifollo picado. Hacerla algo consistente y agregar un cuarto de su
volumen de puré de tomate muy concentrado.
Práctico. Salsa
Béarnaise adicionada de puré de tomate.
Foyot o Valois. Bearnesa
a la que se le añade grasa de carne fundida. Para carnes y pescados a la
parrilla.
Pellaprat. Igual.
Acompaña los huevos, lechecillas de ternera, etc.
Escoffier. Preparar la
salsa Bearnesa según las proporciones indicadas en la receta base. Completarla
con dos buenas cucharadas de gelatina de carne derretida.
Práctico. Salsa
Béarnaise a la glace de viande.
Tyrolienne. Salsa
bearnesa montada con aceite sobre fondo de tomate reducido. Carnes y pescados a
la parrilla.
Práctico. Salsa
Choron. Emplear aceite en vez de manteca. Especial para carnes y pescados
grillés.
Paloise. Salsa béarnaise en vez de estragón menta.
2.2.3. Salsa Holandesa.
Es una salsa
emulsionada templada. Sus ingredientes son: yemas de huevo 8-12, mantequilla 1
kg, zumo de limón y sal.
Elaboración. Se
clarifica la mantequilla. Poner las yemas con un poco de agua y batir al calor
sin que pase de 60 ºC. Añadir la sal y el zumo de limón. Añadir a choro fino la
mantequilla clarificada batiendo. Si se queda muy espesa se le puede añadir un
poco de agua. Pasar por estameña. Verificar el sazonamiento. Mantener a
temperatura entre 40 y 50 º C.
Resultados. El color
deber ser de un amarillo bastante fuerte, perfectamente emulsionado y con un
agradable sabor a mantequilla fresca. En caso de cortarse, se arregla igual que
la Bearnesa.
Aplicaciones.
Acompañamiento de hortalizas, pescados y huevos. Elaboración de salsas
derivadas.
Alternativas. La
mantequilla puede no clarificarse; se puede añadir blanda en pequeños trozos.
Esta es más difícil que se corte. Se puede utilizar vinagre en lugar de limón.
Bocuse. Ingredientes: una cucharada de vinagre de vino blanco; una pulgarada de
pimienta recién molida; 3 yemas de huevo; 250 gr de mantequilla de primera
calidad.
Método: echar en una
sartén pequeña el vinagre, el agua y la pimienta. Reducir esta mezcla, llamada
“gástrica”, a una cucharada de líquido.
Dejar enfriar y,
seguidamente, incorporar las yemas de huevo y 2 cucharadas de agua fría; batir
enérgicamente las yemas y calentar la preparación muy suavemente; batir
constantemente, procurando accionar el batidor de manera que recorra toda la
superficie del fondo de la brasera y no quede pegada a ésta la menor partícula
de huevo.
Caso de que no se
tenga mucha experiencia, aconsejamos colocar la brasera en un baño María de
agua muy caliente, pero no en ebullición. El inicio de cocción que debe ser
dado a las yemas de huevo será más lento
y el éxito más seguro. En efecto, se
trata de crear una ligazón –una base sumamente untuosa-, y en aso de
haber un exceso de calor o una cocción demasiado prolongada de las yemas, éstas
se solidificarían formando partículas granulosas, y perderían sus propiedades
de ligazón y su untuosidad. Por consiguiente, esta primera operación, la más
difícil, consiste en emulsionar la yemas sometiéndolas a un calor progresivo,
de tal modo que la masa vaya espesándose de modo muy homogéneo.
Cuando la emulsión
alcanza la consistencia de la crema de leche fresca reposada, habrá llegado el
momento de incorporar, gota a gota y batiendo constante y enérgicamente, la
mantequilla derretida a consistencia de pomada o en pequeños trozos, así como
una pulgarada de sal.
Si se comprueba que la
salsa se espesa demasiado, tornándose compacta, se echará de vez en cuando (lo
que se denomina “levantar una salsa”) unas gotas de agua tibia. Es preferible
seguir este procedimiento que verter brutalmente un líquido determinado para
aclarar la salsa.
Así es como una salsa
holandesa alcanza todo su sabor y consistencia, aun cuando sea ligera.
Comprobar el sazonamiento y conservar caliente al baño María, a temperatura muy
moderada.
Cualquier exceso de
calor provoca la disociación de las yemas y la mantequilla. Se dice entonces
impropiamente que “la salsa se ha cortado”.
Si se produce este
accidente, se levante nuevamente la salsa vertiendo en una brasera una
cucharada de agua caliente, y seguidamente echando poco a poco la salsa
cortada, para batirla y mezclarla con el agua.
Según sean las
preferencias de los comensales o la ulterior utilización de la salsa, se puede
eliminar la “gástrica”.
En este caso, se
realza el sabor con unas gotas de zumo de limón.
La aplicación de esta
técnica y la utilización de una mantequilla de primerísima calidad son garantía
de éxito: se obtendrá una salsa realmente deliciosa.
Con el fin de no
encarecer la receta, se puede agregar una cantidad más o menos importante de
salsa de mantequilla. No es que preconicemos este subterfugio, pero la realidad
es que permite rebajar el coste de la salsa y hacerla menos sensible a los
efectos de un calor excesivo.
Para una holandesa
clásica utilizar ½ l de salsa de mantequilla, ligada con 3 yemas de huevo y 2
cucharadas de jugo de cocción de champiñones o una cucharada de agua con unas
gotas de limón, o bien ½ l de salsa bechamel ligada de igual manera;
incorporarle, con la brasera apartada del fuego, mantequilla fresca. Cuanta más
mantequilla se agregue, más fina resultará la salsa. Debe quedar bastante
consistente, aun cuando cremosa.
Pellaprat. Seis personas. Tres yemas de huevo; 250 g mantequilla; tres cucharadas de
agua fría; el zumo de un limón.
Poner en una cacerola
las yemas y el agua fría. Batirlo todo fuertemente, en fuego suave o al baño
María, para obtener una crema espesa y esponjosa. Luego, siempre con poco fuego
o al baño María, después de haber batido algunos momentos, incorporar la
mantequilla fundida y tibia, poco a
poco, batiéndola sin parar. No utilizar el suero que sale de la mantequilla
fundida. Esta salsa está en su punto cuando pueda naparse con ella. Añadir sal,
pimienta blanca, cayena y el zumo de un cuarto de limón. Pasar por una
estameña. Conservarla al baño María, con calor moderado, pues de otra forma
puede cortarse.
Escoffier. Poner en una cazuela 4 yemas de huevo, 4 cucharadas de agua fría, una
pulgarada de sal y otra de pimienta molida.
Sobre un fuego suave,
incorporarle poco a poco, 500 gr de mantequilla, agitándola continuamente con
un batidor pequeño, como se hace con la Mayonesa. A medida que la salsa vaya
subiendo, agregar algunas cucharaditas de agua.
Esta salsa, aunque
debe resultar ligera, he de se espesa, por lo que es preciso que la cocción sea
a fuego muy lento para que las yemas y la mantequilla vayan adquiriendo
consistencia a medida que se agrega la mantequilla.
Rectificar la sazón
con la sal precisa, y algunas gotas de limón.
Colar con un tamiz
fino.
Práctico. Hollandaise. Un kilo de manteca, 12 yemas. Trabajar con un batidor en
pomada las yemas con un poco de agua (poca) sobre la plancha de la cocina a
temperatura moderada. Luego sin parar de batir colocar la cacerola sobre la
mesa y montarla adicionándole la manteca clarificada, en chorro fino no muy
caliente. Pasar a la estameña. Sazonar de sal, jugo de limón y cayena.
Muselina. Se denomina también
Chantillí. Se añade a la holandesa en el momento de servir nata montada. Para
pescados cocidos y para hortalizas.
Bocuse. Salsa
holandesa, a la que se agrega una tercera parte de su volumen de crema de leche
fresca batida.
Pellaprat. Es una
salsa holandesa espesa, a la cual se añade a última hora, tres cucharadas de
crema batida.
Escoffier. En realidad
se trata de una salsa Holandesa a la que se incorpora en el momento de
servirla, 2 cucharadas de crema batida, por cada medio litro de salsa.
Sirve de
acompañamiento para pescados hervidos y legumbres, tales como espárragos,
salsifís, cardos, etc.
Salsa chantilly o
salsa muselina clásica. Preparar ½ l de salsa de mantequilla e incorporarle,
para finalizarla, 4 cucharadas de crema de leche fresca, batida enérgicamente
con una cucharada de leche. Al batir la crema procurar no prolongar demasiado
dicha operación, so pena de que se convierta en mantequilla.
Práctico. Mousseline
ou Mousseuse. Salsa Holandesa adicionada de crema de leche reducida.
Maltesa. Se le incorpora en el
momento de servir el zumo y la piel cortada en juliana y blanqueada de naranjas
sanguinas.
Para espárragos
principalmente.
Bocuse. Salsa
holandesa rociada con zumo de naranja sanguínea y con unas gotas de curaçao.
Pellaprat. Tres dl
salsa holandesa espesa; dos cucharadas de zumo de naranja sanguina; la piel de
una naranja sanguina en juliana.
Es una salsa holandesa
a la cual se añade el zumo de una naranja sanguina y la cáscara de la naranja
blanqueada dos minutos en agua, y luego escurrida. Se sirve con espárragos.
Práctico. Maltaise.
Salsa holandesa adicionada de jugo y corteza de naranja sanguínea.
Irlandaise. Salsa
holandesa adicionada de hojas de menta verde blanqueadas y picadas.
Noisette. Salsa holandesa a la manteca
Noisette.
2.2.4. Salsa vinagreta.
Es una salsa
emulsionada en frío, confeccionada con tres partes de aceite por una de
vinagre. Es una emulsión muy inestable por lo que se monta al momento de
servirla. Se suele sazonar con sal y azúcar.
Dará como resultado
una salsa poco espesa.
Se utiliza para todo
tipo de ensaladas tanto simples como compuestas. Derivadas.
Esta salsa se puede
elaborar con todo tipo de aceites: oliva, nuez, sésamo, etc. También los
vinagres pueden ser de cualquier tipo, de vino, sidra, frutas, jerez, etc.
Se denomina francesa
si se le añade mostaza.
Una posible derivada
sería la Ravigote, que podría ser templada. A la vinagreta se le añade muy
picado, perejil alcaparras, perifollo, estragón y cebolla. Para hortalizas,
huevos, pescados hervido fríos.
Bocuse. “Ravigote”.
Echar en una ensaladera 5 g de sal fina, una pizca de pimienta recién molida, 2
cucharadas de alcaparras ligeramente trituradas, una cucharadita de perejil
picado, una de perifollo, una de estragón, una de mostaza y una cebolla de
tamaño mediano cortada en finas rodajas<, verter sobre estos elementos,
removiendo enérgicamente con un batidor y con toda lentitud, 2 cucharadas de
vinagre y 5 de aceite. Cuando se utiliza para acompañar cabeza o pies de
ternera, agregarle 3 cucharadas del líquido de cocción caliente.
Pellaprat. Ravigote o
vinagreta. Tres dl aceite; un dl vinagre; 25 g alcaparras; perejil; estragón;
cebollinos picados; 100 g cebollas picadas; sal; pimienta.
Mezclarlo todo con el
aceite. Esta salsa es muy adecuada para acompañar la cabeza de ternera y
algunas carnes hervidas.
Escoffier. Vinagreta o
Ravigote. 2 dl y medio de aceite, un decilitro de vinagre, una cucharada de
alcaparras pequeñas, una pulgarada de perejil, igual cantidad de estragón,
perifollo y cebolletas, todo finamente picado, sal y pimienta. Mezclas a fondo.
Puede agregarse a esta
salsa, una cucharada de cebolla muy picada, una cucharada de mostaza, una
cucharada de salsa inglesa e incluso un huevo duro picado.
Especial para aderezar
cabeza y patas de ternera, patas de cordero y para pescados fritos.
Práctico. Ravigote o
Vinaigrette. Aceite, vinagre,
alcaparras, pepinillos, cebolla, perejil, perifollo, estragón, cebollina, huevo
duro. Todo picado fino. Sazonar: sal, pimienta y un poco de mostaza. Mezclar.
Salsas
con nombre propio de la cocina española.
Salsa Romesco.
Es una salsa típica
catalana con numerosas variaciones. Su composición básica es: cebolla, tomates,
ajos, pimientos secos, pan, almendras, aceite, vinagre, sal y pimienta. Asar
todos los ingredientes, (los pimientos que se pondrán a remojo previamente) e
ir sacándolos según estén hechos.
Majar y pasar.
Incorporar el aceite y el vinagre. Sazonar.
Se utiliza
principalmente para pescados.
Salsa vizcaína.
Es originaria del País
Vasco, teniendo varias recetas específicas. Los puristas no utilizan tomate en
su elaboración. La base es; abundante cebolla, pimientos secos, pan frito, ajo,
laurel, hueso de codillo y aceite. (se suele utilizar vino blanco y algo de
fumet)
Se utiliza para platos
con elementos gelatinosos, bacalao, manos de cerdo, etc.
Salsa verde.
Existen numerosas
modalidades pero la básica utiliza, aceite, ajos, perejil y fumet. Se le podría
añadir, vino blanco, cebolla y pasar el pescado por harina para facilitar el
ligado.
Para pescados.
All i oli.
Ingredientes: 6
dientes de ajo, abundante aceite fino y sal.
Pelaremos los dientes
de ajo a los echaremos en un mortero majándolos bien y añadiendo un poco de
sal. Adicionaremos el aceite en forma de hilillo removiendo continuamente con
el “boix” o mano del mortero hasta conseguir una salsa firme y espesa.
Como variación se le
podrá añadir alguna yema de huevo.
Algunas salsas especiales.
Salsa cumberland.
Se dice que es una
salsa de origen inglés, inventada en honor del Duque Ernesto Augusto de
Cumberland (1845/1923), pero hay indicios que sitúan su invención a la comarca
alemana de Hannover.
Se compone de jalea de
grosellas templada y colada a la que añadiremos vino de Oporto, chalota picada
y blanqueada, piel en juliana de naranja y de limón previamente blanqueadas,
zumo de naranja y mitad de zumo de limón, mostaza, jengibre y cayena.
Para caza y patés
fríos.
Pellaprat. Seis personas. Dos escalonias picadas; las pieles
de una naranja y de medio limón cortadas en juliana fina; 300 g gelatina de
grosella; dos cl vino de Oporto; el zumo de media naranja; algunas gotas de
zumo de limón; polvo de mostaza y jengibre.
Blanquear las
escalonias picadas así como la juliana de peladuras durante tres minutos,
escurrirlo. Colar la gelatina de grosella. Mezclar la mostaza y el jengibre al
zumo de naranja, el zumo de3 limón y agregar la gelatina de grosella. Terminar
con el Oporto, la juliana y las escalonias, poniéndolo en maceración unas horas
antes de su empleo. Salsa especial para caza, terrinas o patés de caza fríos y
jamón frío.
Escoffier. Salsa inglesa fría. Cumberland Sauce. Se toman 4
cucharadas grandes de jalea de grosellas líquida, a las que se agregarán un dl
de vino de Oporto, media cucharada de escalonias finamente picadas (previamente
blanqueadas durante unos minutos enagua hirviendo y luego secadas en un
lienzo), una cucharada de corteza de naranja y otra de limón cortada en fina
juliana o rallada, e igualmente blanqueada, bien seca y fría, el zumo de una
naranja y de medio limón, una cucharadita de mostaza inglesa en polvo, una
punta de pimienta de Cayena y si apetece, media cucharadita de jenjibre en
polvo. Merclar cuidadosamente.
Práctico. Jalea de grosella, fundida con un poco de vino
Oporto. Guarnición: juliana de cáscara de naranja y de limón blanqueada, jugo
de naranja, cayena y mostaza. (inglesa)
Salsa americana. De
origen francés, nada que ver con la cocina americana, se cree que es la
deformación del término “Armoricain o Armoricana” que procede de una región de
la costa francesa que se denominó antiguamente Armórica.
Otra teoría habla de
que fue creada por un cocinero francés, Pierre Fraisse (Peteres) que se
estableció en París después de haber trabajado en América.
Se compone de aceite,
cebolla, puerro, zanahoria, tomates maduros, bouquet garni, pimentón, vino
blanco y crustáceos. Se le pueden añadir cabezas y caparazones de marisco
flambeados en brandy. Cocido y pasado por el tamiz se rectificará de sal y de
cayena.
Jugo ligado. Es
la salsa que se consigue por la ligazón del líquido procedente de un asado o
salteado después de su desglasado con vino blanco, brandy, Oporto, etc. Y
ligado con fécula. La fécula se añadirá disuelta en frío al jugo hirviendo.
Se puede elaborar
también partiendo de un fondo oscuro reducido.
Acompañamiento de
carnes asadas y salteadas.
Bocuse. Llevar a ebullición un l de fondo de ternera con
coloración; reducirlo a ¼ de su volumen, luego ligarlo con el contenido de una
cucharadita de fécula desleída en un poco de fondo de ternera frío. En cuanto
se haya incorporado la fécula, hacer hervir durante 2 ó 3 minutos, y conservar
al lado del fuego.
Ese jugo debe ser
claro, límpido y dar la impresión, en cuanto a consistencia, del jugo que se
recoge tras la cocción de un trozo de carne de ternera tratado en la brasera y
por sudación, es decir, sin que intervenga ningún líquido para bañar.
Recalquemos que la
utilización de fécula o de “arroz-root” (fécula de calidad superior), en tanto
que factor de ligazón, es, de hecho, un ardid culinario que perjudica el sabor
del jugo, empobrecido por dicha adición. Por demás, se puede sustituir
ventajosamente dicha fécula por idéntica cantidad de tapioca. En tal caso, se
debe cocer cuando menos durante 15 minutos a ligero hervor, con el fin de que
el jugo no se vea enturbiado.
Salsa de mantequilla.
Bocuse. Preparar un roux dorado con 60 g de mantequilla y
50 g de harina. Dejarlo cocer durante 15 minutos; enfriar; incorporarle
entonces 3 dl de agua muy caliente, batiendo enérgicamente la mezcla hasta
obtener una pasta homogénea. Agregar una pulgarada de sal y, según sea la
utilización de dicha salsa, unas gotas de zumo de limón. Poner sobre el fuego
para que se vaya cociendo y apartar del fuego en cuanto se produzca el primer
hervor. Incorporarle, con la brasera apartada del fuego, 60 g de mantequilla
fresca. esta salsa debe ser cremosa y se le puede dar5 el último toque con zumo
de limón. Finalmente, se puede ligar con 2 yemas de huevo, tal como se hace con
la salsa alemana, pero sin llegar hasta la ebullición.
Nota: también es posible proceder
sin cocer la mezcla de mantequilla y harina. Desleír esta última en la
mantequilla apenas derretida, bañarla con agua casi hirviendo, llevar hasta que
se produzca el primer hervor y apartar del fuego para incorporar la
mantequilla. El resultado obtenido es igualmente excelente.
Salsa ginebrina.
Bocuse. Rehogar una cabeza de salmón, junto con 150 g de
una “brunoise” de verduras (verduras cortadas a daditos minúsculos). Escurrir
la mantequilla y el aceite y bañar con 5 dl
de un vino tinto de buena calidad. Dejar reducir hasta que no quede más que un dl, agregar entonces 3 dl de
salsa bordelesa sin tuétano y 50 g de pies de champiñones. Poner a cocer a
fuego suave durante 15 minutos. Espumar. Pasar por la estameña. Llevar
nuevamente a ebullición, y luego, con la brasera apartada del fuego, incorporar
de 50 a 100g de mantequilla fresca. Refinamiento: una cucharadita colmada de
mantequilla de anchoa o una cucharadita de esencia de anchoa.
Salsa picante.
Bocuse. Cortar en finas laminillas una cebolla de tamaño
mediano y 2 escalonias. Poner a calentar una cucharadita de mantequilla en una
sartén; echar en ésta la cebolla y la escalonia y dejar que se vayan fundiendo
suavemente. Cuando hayan quedado bien doradas, agregar:
1º. 3 cucharadas de
vinagre de vino; reducir hasta que no quede más que 2 cucharaditas de líquido.
2º. 3 dl de
semiglaseado o de salsa española. Dejar cocer suavemente durante 15 minutos;
luego, con la cacerola apartada del fuego, echar 60 g de mantequilla y darle el
último toque a la preparación agregando 2 pepinillos de tamaño mediano y
picados, así como una pizca de pimienta recién molida.
Pellaprat. Para un cuarto litro: dos escalonias; un dl
vinagre; un dl vino blanco seco; 50 gr pepinillos; dos dl media glasa; una
cucharada perejil picado. Cocción: 15 minutos.
Saltear con
mantequilla las escalonias picadas, mojar con el vinagre y vino blanco, reducir
en tres cuartos. Añadir la media glasa y dejar cocer durante algunos minutos.
Al momento de servir, añadir los pepinillos picados o cortados en láminas y
perejil picado. No debe hervir después de haber agregado los pepinillos. Para
acompañar cerdo y vaca hervida.
Salsa al estragón.
Bocuse. Reducir a la mitad el contenido de un vaso de
vino blanco seco; poner en infusión, durante 10 minutos, una ramita de
estragón; bañar con 3 dl de semiglaseado o de salsa española o también de jugo
ligado. Reducir una tercera parte; pasar por la estameña o por el tamiz y, con
la brasera apartada del fuego, agregar 60 g de mantequilla fresca.
Condimentar con una
cucharadita de hojas de estragón picadas.
Pellaprat. Para un cuarto de litro: dos dl vino blanco; medio
litro salsa media glasa; una cucharadita de estragón. Cocción: 30 min.
Hervir el vino blanco
y añadir el estragón. Retirar del fuego, dejar en infusión diez minutos y
colarlo. Añadir la media glasa y reducirlo todo a una consistencia de jarabe.
Sazonar y pasar por un tamiz fino. Servir muy caliente, con una pizca de
estragón picado.
Salsa al gratén.
Bocuse. Ingredientes: 200 g de champiñones, limpiados y
lavados muy rápidamente, y escurridos; 6 escalonias picadas; el contenido de un
vaso de vino blanco seco; ½l de semiglaseado o de salsa española; 60 g de
mantequilla; unas ramitas de perejil; ¼ de limón.
Método: Calentar en
una sartén una cucharadita de mantequilla, hasta que adquiera un color
avellana; echar las escalonias y calentarlas a fuego suave; luego, a fuego muy
vivo, agregar los champiñones finamente picados en el último momento para
evitar que se ennegrezcan. Remover constantemente y agregar:
1º. El vino blanco, reduciéndolo
casi por completo.
2º. El semiglaseado.
Dejar hervir suavemente durante 10
minutos; con la brasera apartada del fuego, incorporar el resto de la
mantequilla, una cucharadita de perejil picado en el último momento y el zumo
de ¼ de limón.
Esta salsa debe quedar
bastante consistente.
Pellaprat. Tres dl vino blanco; tres dl fumet de pescado;
cinco dl media glasa; tres escalonias picadas; tres cucharadas de duxelles
seca; media cucharada de perejil picado. Cocción: seis minutos.
Reducir a la mitad el vino
blanco y el fumet de pescado, junto con las escalonias picadas. Añadir la
duxelles y la media glasa y dejar hervir lentamente seis minutos. Agregar el
perejil picado. Salsa especial para el pescado y filetes de pescado al gratín.
Salsa a la cazadora.
Bocuse. Ingredientes: 60 g de mantequilla; 3 cucharadas de
aceite; 100 g de champiñones bien blancos y de carne prieta; una cucharadita de
escalonia picada; ½ vaso de vino blanco seco; 2 dl semiglaseado o de salsa
española; 3 hermosos tomates maduros o 3 cucharadas de puré de tomate; una
pulgarada de perifollo y estragón picados.
Método: poner a
calentar a fuego vivo la mantequilla y el aceite en una sartén; echar en ella
los champiñones cortados en laminillas; hacerles tomar algo de color a fuego
muy vivo. Luego, agregar:
1º. La escalonia, dejando que se
caliente durante unos segundos.
2º. El vino blanco, reduciéndolo a
la mitad de su volumen.
3º. El semiglaseado, o la salsa
española, y el puré de tomate.
Si se utilizan tomates
del tiempo (lo cual es preferible), quitarles el pedúnculo, la parte central
poco madura, las pepitas y el agua de vegetación; trocearlos toscamente y
agregarlos a la preparación después de la escalonia.
En ambos casos, dejar
cocer a fuego suave durante 10 minutos.
En el momento de
servir, con la brasera apartada del fuego, incorporar la mantequilla que queda,
el perifollo y el estragón.
Pellaprat. Para tres dl: 100 gr champiñones; dos escalonias;
un dl vino blanco; 50 gr puré de tomate; 30 gr mantequilla; dos dl media glasa.
Cocción: 20 min.
En una salteadora con
aceite, rehogar los champiñones crudos cortados en láminas delgadas. Cuando se
hayan dorado ligeramente, añadir las escalonias picadas; dejar cocer un minuto,
luego mojar con el vino blanco, reducir a la mitad y agregar la salsa media
glasa y el tomate; dejar cocer a fuego lento durante diez minutos. Retirarla y
agregarle perejil y estragón picados.
Salsa al
vino tinto.
Bocuse. Cortar a daditos diminutos una cebolla gorda y la
parte carnosa de una zanahoria de tamaño mediano; rehogar esta “mirepoix” en
mantequilla durante 20 minutos, removiéndola muy a menudo y procurando que no
tome color. Cuando la “mirepoix” ha quedado bien fundida, agregar 2 dientes de
ajo majados; calentar durante un instante y verter sobre esta preparación ½ l
de vino tinto de buena calidad; sazonar con una pulgarada de sal y una pizca de
azúcar; reducir a 1/3 de su volumen. Seguidamente, incorporar 1/2l de
semiglaseado o de salsa española; dejar cocer a fuego suave durante 20 minutos
y pasar por la estameña, ejerciendo presión sobre las verduras; dar un nuevo
hervor y, con la brasera apartada de la lumbre, agregar 50 g de mantequilla
fresca, como mínimo.
Salsa ruanesa.
Bocuse. Preparar ½ l de salsa bordelesa sin tuétano.
Cuando esté bien caliente, pero no hirviendo, agregar, removiendo
continuamente, una ligazón compuesta por 3 hígados crudos de pato, reducidos a
puré, al haberlos pasado, ejerciendo una fuerte presión, a través de un tamiz
fino, y desleídos en un bol con un poco de salsa bordelesa; calentar sin dejar
de remover la salsa hasta el momento en que la preparación esté a punto de
hervir.
Apartar la brasera del
fuego y pasar la salsa por la estameña; el puré de hígado de pato debe quedar
íntimamente incorporado a la salsa, a la que dará un aspecto cremoso. Finalizar
la preparación rociando con una copita de coñac e incorporando 50 g de
mantequilla fresca o 50 g de foie-gras reducido a puré.
Comprobar el
sazonamiento de la salsa antes de su utilización. Realzarla con un poco de
pimienta recién molida.
Salsa pebrada.
Cortar a daditos
diminutos la parte carnosa de una zanahoria de tamaño mediano, 2 cebollas de
tamaño mediano y un fragmento de apio. Poner a fundir todos estos elementos en
una brasera con una cucharadita de mantequilla, dejando que tomen algo de
color.
Bañar con ½ l de un
adobo en el que se esté macerando carne de caza. Reducir a 1/3 parte del
volumen y agregar ¾ l de semiglaseado o de salsa española y huesos o recortes
de caza.
Cocer a fuego muy
suave y a brasera tapada por espacio de 3 horas.
Luego, pasar por la
estameña ejerciendo una fuerte presión sobre las verduras y sobre los recortes
de caza.
Con la brasera
apartada del fuego, incorporar finalmente el desglaseado de la pieza de caza
que vaya a acompañar, así como una cucharadita de jalea de grosella (siempre y
cuando guste este sabor) y una cucharadita de mostaza de Dijon. Tanto la jalea
como la mostaza no son absolutamente necesarios. No dejar que la salsa vuelva a
hervir.
Realzar esta salsa con
pimienta recién molida.
Salsa al tuétano. (espacial para verduras)
Bocuse. Se prepara esta salsa de igual forma que la salsa
bordelesa, pero sustituyendo el vino tinto por vino blanco. Doblar la cantidad
de tuétano indicada, parte del cual, cortado a daditos, es agregada a la salsa,
en tanto que el resto, cortado a pequeñas rodajas, es dispuesto sobre las
verduras.
Se puede utilizar esta
salsa para acompañar huevos escalfados o “mollets” o pescado asado a la
parrilla.
Salsa de alcaparras.
Bocuse. Incorporar a una salsa de mantequilla alcaparras
finas, a razón de 3 cucharadas por ½ l de salsa. En cuanto se hayan agregado
las alcaparras, no dejar ya hervir más la salsa.
Salsa de gambas.
Bocuse. Utilizar salsa al vino blanco (1/2 l) e
incorporarle 100 g de mantequilla de gambas. Esta salsa debe tener un color
rosa pálido, ligeramente asalmonado, que se logra mediante la adición de un
poco de mantequilla, bien sea de cangrejos de río, de bogavante o de langosta,
bien sea de puré de tomate muy reducido.
Salsa joinville.
Bocuse. Preparar salsa al vino blanco y agregarle una
buena cantidad, a partes iguales, de mantequilla de gambas y de mantequilla de
cangrejos de río. Dar el último toque incorporándole una cucharada de trufas
cortadas en fina juliana por cada 2 dl de salsa.
Salsa a las hierbas finas.
Bocuse. Utilizar ½ l de salsa de mantequilla;
aromatizarla en el momento de servir con 2 cucharadas de perejil, perifollo y
estragón picados a partes iguales, previamente escaldados, refrescados y
secados.
Salsa smitane.
Bocuse. Cortar en finas rodajas una cebolla de buen
tamaño; escaldarla, refrescarla, escurrirla y ponerla a rehogar a fuego lento
durante 20 minutos con una cucharadita de mantequilla. Remover la cebolla
frecuentemente y procurar que apenas se ponga dorada. No debe tomar color.
Bañar con 2 dl de vino blanco seco. Reducir a ½ cucharada de líquido;
incorporar ½ l de crema de leche fresca y una pulgarada de sal. Hacer hervir y
reducir rápidamente a las 2/3 partes del volumen. Pasar la salsa por una
estameña fina (muselina). Dar un nuevo hervor, y luego, con la brasera apartada
del fuego, agregar 30 g de mantequilla a trocitos; remover bien y echar zumo de
limón, con el fin de que la salsa adquiera un sabor ligeramente acre.
Salsa al curry.
Bocuse. Cortar en finas rodajas una cebolla de tamaño
mediano y ponerla a rehogar; dorar en mantequilla, a fuego suave y con la
brasera tapada. Agregar una ramita de tomillo, un trocito de hoja de laurel,
una pulgarada de macis. Espolvorear con 50 g de harina y con 20 g de curry en
polvo. Cocer durante 10 minutos, removiendo frecuentemente.
Bañar con ¾ de l de
fondo blanco, o de caldo blanco, o de “fumet” de pescado, si la salsa debe
acompañar un pescado. Dejar cocer a fuego lento durante 30 minutos; pasar la
salsa por la estameña, ejerciendo una fuerte presión, y tras darle un nuevo
hervor, finalizarla con 4 cucharadas de crema de leche fresca o aún mejor, de
leche de coco, caso de que se disponga de ella.
Nota: se puede obtener
una excelente salsa al curry siguiendo un procedimiento más sencillo y menos
exótico: preparar un fondo de ave enriquecido con un fondo e ternera,
condimentarlo abundantemente con cebolla y con curry de origen. Tras la
cocción, pasar por la estameña y ligar con “arrow-root”.
Pellaprat. Para un litro y cuarto: una cebolla grande
cortada muy fina; una manzana mediana rallada; 50 gr mantequilla; 60 gr harina;
dos cucharaditas de polvos de curry; un trozo de piel de naranja seca y
finamente cortada; un pequeño diente de ajo machacado; un litro fondo oscuro;
un dl puré de tomate; un dl leche de nuez de coco.
Dorar con mantequilla
la cebolla. Espolvorear con la harina y el curry sin que tome color. Añadir la
manzana, el fondo oscuro y el puré de tomate. Dejar hervir. Salar un poco,
añadir el ajo y la naranja. Cocer a fuego
lento durante 40 minutos. Añadir la leche de coco y dar algunos hervores.
Servir esta salsa sin colar, en la que cocerá los manjares preparados a la moda
angloindia; vaca, carnero, cordero, aves y pescado de carne dura. Estos platos
se acompañan siempre de arroz hervido a la criolla.
Salsa alioli.
Bocuse. Ingredientes:8 dientes de ajo; 2 yemas de huevo;
3 dl de aceite; una pulgarada de sal; ½ limón.
Método: majar el ajo
en un mortero; incorporar las yemas así como la sal a la pasta así obtenida;
seguidamente, ir vertiendo el aceite gota a gota mientras se sigue removiendo
con la mano de almirez. Mantener la salsa a consistencia cremosa agregándole de
vez en cuando unas gotas de zumo de limón (constituyendo éste el elemento ácido
de la preparación de agua tibia).
Salsa verde.
Bocuse. Preparar salsa mayonesa y hacer que adquiera un
color verde de la manera siguiente: majar en el mortero o picar muy menudo un
buen puñado de espinacas limpias y lavadas, y mezcladas con una remita de
estragón y una pulgarada de perifollo. Echar en un paño las hiervas troceadas,
ejercer una fuerte presión y recoger el jugo en un recipiente pequeño; colocar
este último al baño María.
Bajo la acción del
calor, el jugo de hierbas se descompondrá, coagulándose una parte y
clarificándose la otra.
Cuando las moléculas
verdes se hayan solidificado suficientemente, pasar a través de una estameña
fina. Se utilizará entonces la parte verde para dar color a la salsa mahonesa y
se rematará la preparación espolvoreando con una pulgarada de perifollo, de
perejil, de cebolleta y de estragón picados todos ellos muy menudos.
Salsa gribiche.
Bocuse. Ingredientes: 5 huevos duros poco cocidos; sal;
pimienta; 4 dl de aceite; 2 cucharadas de vinagre; una cucharadita de mostaza;
una cucharadita de perifollo; una cucharadita de estragón picado; una
cucharadita de alcaparras; 3 pepinillos de tamaño mediano picados; hierbas
finas.
Método: echar las
yemas de huevo duro en un cuenco, junto con la sal y la pimienta; triturar
bien; agregar a esta pasta el vinagre, y luego, el aceite, gota a gota,
exactamente igual que si se tratase de una salsa mayonesa. Mantener en una
consistencia cremosa mediante la adición de vinagre y agua tibia, si fuese
necesario, finalizar la preparación incorporándole las hierbas finas, las
alcaparras, los pepinillos y las claras de huevo cortadas a daditos diminutos.
Comprobar le sazonamiento.
Esta salsa viene a ser
una mayonesa en la que las yemas de huevo se utilizan cocidas en vez de crudas.
Salsa mahonesa a la crema.
Bocuse. Mezclar a una salsa mayonesa, en la que el zumo
de limón sustituye al vinagre, la cuarta parte de su volumen de crema de leche
fresca batida.
Salsa al raifort.
Bocuse. Ingredientes: una cucharadita de mostaza; 2
cucharadas de vinagre; 50 g de “rai-fort” (rábano blanco) rallado; 50 g de azúcar en polvo; una pulgarada de sal
de mesa; 5 dl de crema de leche fresca; 500 g de miga de pan, remojada en leche
y bien exprimida.
Método: desleír en un
cuenco la mostaza con el vinagre; agregar el “raifort”, la sal, el azúcar y la
miga de pan. Diluir esta pasta con la crema de leche fresca.
Salsa portuguesa fría.
Bocuse. Picar muy menuda una cebolla gorda y 2
escalonias, hacerlas dorar a fuego suave con 3 cucharadas de aceite de oliva en
una sartén; cuando tanto la cebolla como las escalonias hayan quedado blandas,
bañarlas con 2 dl de vino blanco seco y reducir casi totalmente.
Añadir el contenido de
2 vasos de tomates pelados, desprovistos de pepitas y toscamente troceados;
evitar exprimir su agua de vegetación; sazonar con sal y pimienta recién
molida; poner a cocer y reducir hasta consistencia de un puré no demasiado
espeso. Con la brasera apartada del fuego, montar esta salsa con un dl de
aceite de oliva; realzar su sabor rociándola con el zumo de ½ limón. Comprobar
su sazonamiento.
Salsa ruanesa fría.
Bocuse. Preparar 4 dl de salsa bordelesa. Por otro lado,
hacer pasar por el tamiz un hígado de canetón o 2 hígados de ave, sazonar con
una pizca de sal y con una chispita de pimienta recién molida; diluir el puré
de hígado con una cucharada de un coñac de buena calidad.
Incorporar a la salsa
bordelesa un dl de fondo de ternera muy gelatinoso y reducir la preparación, a
fuego muy vivo, hasta que no queden más que unos 3 dl, aproximadamente;
comprobar el sazonamiento; seguidamente, con la brasera apartada del fuego,
ligar con el puré de hígado, mezclando a este último unas cucharadas de salsa
reducida y vertiendo la ligazón así obtenida en el resto de la salsa; batir
enérgicamente con un batidor durante el transcurso de esta última operación.
Finalmente, pasar a través de la estameña, ejerciendo una fuerte presión.
Salsa “chaud-froid” oscura.
Bocuse. Reducir, tal como viene indicado en la receta de
chaud froid blanca 4 dl de semiglaseado aromatizado con vino de Madeira;
incorporar, muy poco a poco, idéntica
cantidad de una buena gelatina apenas sazonada con sal.
Cuando la preparación
haya quedado reducida a la mitad, colarla a través de la estameña, recogerla en
un cuenco y dejar que ose enfríe algo siguiendo las mismas normas que las dadas
para la salsa “chaud-froid” blanca. Utilizarla antes de que se haya coagulado.
Esta salsa puede ser
aromatizada con vino de Oporto, Jerez, Marsala, etc.
Chaud froid de caza.
Pellaprat. Reemplazar el tipo de fondo por uno de caza.
De corzo.
Pellaprat. Para 4 dl: cinco dl salsa pimentada; un dl vino
tinto.
Reducir la salsa
pimentada de una tercera parte, incorporando el vino tinto poco a poco. Sazonar
con cayena y colar.
Pimentada.
Pellaprat. Para cuatro dl: 250 g recortes de caza; una
zanahoria; una cebolla; cinco cl vinagre; medio litro media glasa; un dl
marinada; pimienta en grano; tomillo; laurel; perejil. Cocción: una hora y
media.
Saltear los recortes
de caza con un poco de aceite, añadir zanahorias, cebollas y aromas. Cuando
todo esté bien dorado, echar el vinagre y dejar reducir a fondo. Rociar con la
media glasa y la marinada. Añadir seis granos de pimienta aplastados y dejar
cocer lentamente durante una hora. Desgrasar, pasar y reforzar el sazonado.
Salmis.
Pellaprat. Para un cuarto de litro: una cebolla; una
escalonia; un diente de ajo; tomillo; perejil; media hoja de laurel; una
cucharada de aceite de oliva; un cuarto litro vino blanco; un cuarto litro
media glasa; dos carcasas de caza de pluma (perdiz o becada), cocidas. Cocción:
30 minutos.
Dorar con una
cucharada de aceite la cebolla cortada groseramente, añadir la escalonia
picada, una punta de ajo machacado, perejil, tomillo y laurel. Darle una vuelta
y mojar con el vino blanco. Reducir en sus tres cuartos y añadir la media glasa.
Dejar cocer y machacar en puré las osamentas. Mezclar este puré con la salsa.
Dar un solo hervor, y pasar por el chino sobre trozos de caza.
Tortuga.
Pellaprat. Para un litro: tres gr salvia; dos gr albahaca;
dos gr romero; un gr mejorana; un gr tomillo; un gr laurel; cinco gr perejil;
20 recortes de champiñones; cinco gr pimienta; un cuarto litro fondo de
ternera; tres cuartos litro media glasa; un cuarto litro salsa de tomate; un dl
vino de Madera; pimienta de Cayena. Cocción: 30 minutos.
Poner las hierbas y
recortes de champiñones con el fondo de ternera hirviendo. Taparlo y dejarlo en
infusión 25 minutos. Añadir la pimienta tres o cuatro minutos antes de pasar el
fondo en la media glasa, a la que se habrá añadido salsa de tomate. Reducir en
un cuarto. Pasar por el tamiz y poner en
su punto con el vino de Madera, sazonándolo con un poco de cayena. Salsa
especial para la cabeza de ternera.
Caza mayor (venaison).
Pellaprat. Para cuatro dl: añadir fuera del fuego, a medio
litro de salsa pimentada, un dl de nata muy fresca y dos cucharadas de gelatina
de grosella. Se sirve con la caza.
Salsa zíngara.
Pellaprat. Para cuatro dl: un cuarto litro media glasa; un
dl salsa de tomate; cinco cl fondo de champiñones y vino blanco; 50 gr jamón
cocido; 50 gr champiñones cocidos; 50 gr lengua escarlata; 30 gr trufas.
Cortar en juliana los
champiñones, el jamón, la lengua y las trufas. Reducir a la mitad el fondo de
champiñones y vino blanco. Añadir la media glasa y la salsa de tomate. Cocer
durante cuatro o cinco minutos. Añadir la juliana. Sazonar con pimienta de
cayena. Salsa especial para la ternera y las aves.
Salsa albufera.
Pellaprat. Un litro de salsa suprema; dos dl glasa de carne.
Mezclarlo todo.
Especial para aves escalfadas o braseadas.
Anchoas.
Pellaprat. Un litro bechamel, salsa normanda o velouté de
pescado; 150 gr mantequilla de anchoas; cuatro filetes de anchoas.
Hervir la salsa de
base. Añadir poco a poco la mantequilla de anchoas. Terminar añadiendo los
filetes de anchoa picados y pasados por un tamiz.
Con mantequilla llamada también bastarda.
Pellaprat. Para un litro: 60 gr mantequilla; 50 gr harina;
tres yemas huevo; un dl nata; 200 gr mantequilla; una cucharada zumo de limón;
siete gr sal; nueve dl agua.
Mezclar la mantequilla
fundida con la harina. Mojar de una sola vez con nueve dl de agua hirviendo,
salar y mezclar fuerte con el batidor. Ligar con las yemas de huevo desleídas
con la nata, añadiendo el zumo de limón. Pasar por el tamiz, y montar con
mantequilla fuera del fuego.
Salsa café de París.
Pellaprat. 125 gr de mantequilla Café de París; un litro y
cuarto de crema fresca o nata; diez gr de mantequilla trabajada con diez gr
harina. Cocción: cinco minutos.
Calentar ligeramente
la crema en una salteadora. Añadirla la mantequilla Café de París y la
mantequilla trabajada. Calentar lentamente hasta completar la ligazón.
Salsa dieppoise.
Pellaprat. Para medio litro: medio litro salsa al vino
blanco; cinco dl fondo de mejillones; cinco dl vino blanco; 50 gr mantequilla;
75 gr mejillones desbarbados; 50 gr camarones sin caparazón.
Mezclar el fondo de
los mejillones y el vino blanco. Reducirlo a la mitad, añadir la salsa al vino
blanco y dejarlo con la consistencia deseada. Incorporar los mejillones, los
camarones y la mantequilla.
Bogavante.
Pellaprat. Un litro velouté de pescado; dos dl de crema; 10
gr mantequilla de bogavante.
Incorporar la crema al
velouté caliente y reducir una quinta parte. Agregarle la mantequilla fuera del
fuego.
Húngara.
Pellaprat. Para medio litro: una cebolla grande picada; 50
gr tocino ahumado en pequeños dados; una cucharada de té de paprika; medio
litro velouté; 30 gr mantequilla; un dl crema agria; un chorrito de zumo de
limón.
Dorar la cebolla y el
tocino en la mantequilla, añadir la paprika y rehogarlo un momento. Mojar con
el velouté y dejar cocer 25 minutos a fuego lento. Colarlo, añadir la crema
agria, dar algún hervor más, ponerle limón y sazonarlo.
India.
Pellaprat. Para medio litro: una cebolla mediana finamente
picada; 40 gr mantequilla; 30 gr harina; una cucharadita rasa de polvo de
curry; seis dl fondo claro; un dl crema fresca; 100 gr nuez de coco rallada.
Dorar la cebolla con
la mantequilla. Espolvorear con harina y curry, y rehogarlo sin que tome color.
Mojar con el fondo, mezclar, salar ligeramente y hacer cocer a fuego lento
durante 25 minutos. Preparar la leche de coco, haciendo una infusión con su
pulpa rallada en un cuarto de litro de agua hirviendo. Dejar diez minutos a 80
grados con el recipiente tapado. Pasar por el tamiz. Guardar solo la leche. Colar
la salsa, añadir la crema y la leche de coco. Darle un hervor. Esta salsa es
apropiada para acompañar huevos, aves blancas y langostinos. La guarnición es
siempre un arroz a la criolla.
Marfil.
Pellaprat. Medio litro salsa suprema; una cucharada sopera
glasa de carne o ave.
Ligar la salsa suprema
a la glasa desleída para darle un tono marfil.
Salsa Matelote.
Pellaprat. Para medio litro; un litro velouté de pescado;
medio litro caldo corto de pescado con vino blanco; 150 gr mantequilla; 150 gr
champiñones cortados finos; 150 gr pequeñas cebollas glaseadas con mantequilla.
Reducir el caldo corto
en tres cuartos. Añadir el velouté, cocer algunos minutos. Montar con la
mantequilla, incorporando los champiñones y las cebollas. Sazonar con un poco
de cayena.
Salsa rica.
Pellaprat. Medio litro salsa cardenal; 125 gr de carne de
bogavante; una trufa mediana.
Veneciana.
Pellaprat. Para cuatro dl: medio litro salsa vino blanco; un
dl vinagre; un dl vino blanco; dos escalonias; estragón; perifollo y cebollino;
20 gr espinacas cocidas.
Mezclar las hierbas
picadas con el vino y vinagre. Reducir en dos tercios y pasar por el tamiz.
Añadir la salsa al vino blanco y dejarla hervir. Retirarla del fuego, y darle
color verde con el jugo de las espinacas picadas y pasadas por una estameña.
Villeroi.
Pellaprat. Para cuatro dl: medio litro salsa suprema; seis
yemas de huevo.
Reducir la salsa
suprema ligada con las yemas de huevo, hasta que espese lo necesario para
recubrir bien las piezas, que luego se empanarán a la inglesa.
A la mantequilla blanca.
Pellaprat. Una escalonia cortada gorda; un dl vino blanco o
vinagre, 150 gr mantequilla.
Reducir el vino blanco
(o el vinagre) con la escalonia. Cuando apenas quede líquido se retira la
escalonia. Lavar la mantequilla con agua fría, y trabajarla para ablandarla y
mezclarle sal y pimienta. Ponerla en una cacerola que esté fría. Mezclar poco a
poco con un batidor para que la masa no se funda completamente. Esta salsa, es
de origen nantés, y algunas veces se reduce con Muscadet, vino blanco típico
del país.
Apple sauce.
Pellaprat. Es un puré de manzanas espeso, con canela, que se
sirve caliente con el asado de cerdo, las chuletas de cerdo a la normanda, la
oca asada, el pato, y con la caza en general.
Bread sauce.
Pellaprat. Seis
personas: 75 gr miga de pan; tres dl leche; una cebolla pequeña; un clavo; un
dl crema de leche. Cocción: 20 minutos.
Cocer la miga de pan
en la leche, con el clavo incrustado en la cebolla. Sazonar con sal y pimienta.
Cuando esté hecha, quitar la cebolla y afinar la salsa con el batidor. Añadir
la crema. Se sirve con aves y caza de pluma asadas.
Cranberry sauce.
Pellaprat. Seis personas: 250 gr murtillas rojas; 100 gr
azúcar. Cocción: doce minutos.
Cocer las murtillas en
cuatro dl de agua. Escurrirlas y pasarlas por un tamiz. Al puré que se obtiene,
añadirle el agua de la cocción hasta lograr una salsa. Se sirve con aves, en
especial con las pavas.
Horseradish sauce.
Pellaprat. Seis personas: tres cucharadas de raifort (rábano
silvestres rallado); una cucharadita de mostaza; dos cucharaditas de vinagre,
tres dl crema espesa; 50 gr miga de pan; media cucharadita de azúcar glasa;
sal; salsa Worcestershire.
Mezclar la miga de
pan, el raifort, la mostaza y el vinagre, hasta que la salsa quede alisada.
Añadir poco a poco la crema, sazonar con azúcar, sal y algunas gotas de salsa
Worcestershire. Agitar con la batidora para obtener una salsa espesa y
mantecosa.
Mint sauce.
Pellaprat. Seis personas: 100 gr hojas de menta frescas
picadas; 50 gr de azúcar; tres dl vinagre; dos dl agua.
Mezclarlo todo,
sazonándolo con sal y pimienta. Se sirve con el cordero.
Piccadilly sauce.
Pellaprat. Seis personas: medio litro mayonesa; dos
cucharadas de crema agria; el zumo de un limón; una pizca hinojo picado; salsa
Worcestershire.
A una mayonesa muy
firme, agregarle algunas cucharadas de crema de leche también consistente, el
zumo de un limón, una pizca de hojas de hinojo picadas y un hilo de salsa
inglesa. Se sirve con el pescado frío.
Sauce Smitane.
Pellaprat. Seis personas. Una cucharada de cebollas picadas;
30 gr mantequilla; un dl vino blanco; cuatro dl crema agria. Cocción: diez
minutos.
Saltear la cebolla
picada con la mantequilla dorada. Mojar con vino blanco y reducir en tres
cuartos. Añadir la crema agria, cocer cinco minutos más y ajustar el sazonado
con pimienta molida y zumo de limón.
Comentarios
Clara, extensa, bien estructurada y semanticamente excepcional.
Gracias
Muchísimas gracias por tus aportaciones...Estoy elaborando el temario para la oposición y tu blog es de gran ayuda. Muchísimas gracias!